Solventado en el pasado ejercicio el contrato de servicio de recogida de basuras, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Ávila afronta para el año 2025 el objetivo de renovar otro importante contrato, en este caso el del servicio de transporte urbano colectivo, cuya vigencia terminaba en el año 2020, pero que se ha ido prorrogando automáticamente año tras año hasta que haya una nueva licitación.

Ese momento, el de una nueva licitación, podría llegar el año que viene. Esa es al menos la intención de Por Ávila, pero que marca una condición para que sea posible, y esa no es otra que el presupuesto que presente a los grupos de la oposición en las próximas fechas, sea aprobado. De lo contrario, el contrato no podrá renovarse por falta de financiación.

El portavoz del equipo de gobierno, José Ramón Budiño, reconoció, a preguntas de los periodistas que ese nuevo contrato para el servicio de autobuses urbano está «supeditado a que haya una posible financiación del mismo» y eso pasa, dijo, «porque se puedan plasmar en los presupuestos esas mejoras que lógicamente precisa el servicio público de transporte urbano colectivo». 

Budiño confirmó que en la propuesta de presupuesto para 2025 que Por Ávila entregará próximamente a los diferentes grupos políticos que forman parte del Consistorio abulense, «va a ir reflejada esa cuantía presupuestaria para poder afrontar ese nuevo pliego», cuyo licitación el año que viene «dependerá, una vez más, de la capacidad de poder actualizar tasas e impuestos para poder tener los ingresos suficientes para poder llevar a cabo dicha licitación».

El portavoz del equipo de gobierno afirmó que el cálculo de la cantidad que necesita ese nuevo contrato está hecho por parte del área de Hacienda del Ayuntamiento de Ávila y así quedará reflejado en ese borrador de presupuestos, « «pero por lealtad institucional al resto de grupos no lo puedo avanzar ahora mismo». Únicamente informó que «siempre que se quiere sacar a la licitación un nuevo servicio se tiene que desarrollar un presupuesto estimatorio en base a las necesidades y posibles circunstancias a modificar en dicho pliego». Será «una vez que tengamos esa certeza de que se puede acometer, cuando el contrato se licitará, tal y como se hizo con el pliego del servicio de recogida de basuras».

De momento Por Ávila no ha hecho llega al resto de partidos, PP, PSOE y VOX el que será su proyecto de presupuestos, que se acompañará con el de ordenanzas fiscales, pero Budiño aseguró que esta entrega se producirá en «en tiempo y forma. Nos comprometimos en que sería este mes y así será. Tenemos tiempo por delante aún para hacerlo, y se cumplirá».

Será una vez que tengan ambos borradores, el de presupuestos y el de ordenanzas, y después de que lo hayan estudiado y analizado, «cuando se producirán las reuniones pertinentes con ellos», con la vista puesta en un posible acuerdo que permita, vía apoyo de alguno de los grupos políticos de la oposición o vía abstención, su aprobación.

El proyecto de ordenanzas fiscales que presentará Por Ávila recoge una actualización de tasas e e impuestos que contempla una subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que ya intentó, sin éxito, el año pasado.