El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible formalizó, por 3,6 millones de euros, un contrato para analizar el estado de los firmes de las carreteras y determinar su resistencia a los deslizamientos en un total de 124.500 kilómetros de la Red de Carreteras del Estado, donde se enmarcan las vías de Castilla y León, tanto de la demarcación occidental como oriental.
En concreto, se auscultarán las características superficiales de los pavimentos para, en su caso, promover actuaciones de conservación y contribuir a reforzar la seguridad vial, cuyo anuncio se publicará próximamente en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
La auscultación se hará midiendo el coeficiente de rozamiento transversal (CRT), relacionado con la resistencia al deslizamiento, mediante un equipo de Control de Adherencia sobre Pavimentos Mojados (SCRIM), que consta de un camión equipado con una cisterna de agua, provisto de una rueda lisa de ensayo, colocada en su lado derecho, de forma que la medida se lleva a cabo en la parte de la calzada más solicitada por el tráfico.
Con la obtención de estos datos, la Dirección General de Carreteras actualizará su sistema de gestión de firmes para promover la mejora de las características superficiales de los firmes, a través de actuaciones de conservación. El contrato se enmarca en el objetivo del Ministerio de incrementar la inversión en conservación y mantenimiento de carreteras, a fin de mejorar la seguridad de los usuarios y preservar el patrimonio público viario.