Si hay un municipio con una tradición taurina ancestral éste es  Madrigal de las Altas Torres. El municipio recuperó hace unos años una tradición que se había perdida hace tiempo, ‘El toro de San Nicolás’, un encierro en el que se soltaron tres toros que hicieron disfrutar de una tarde fría de infierno a los muchos aficionados taurinos que hay en esta villa y a otros tantos que se acercaron de localidades limítrofes y de otros puntos de ciudades y provincias españolas.

La nota negativa la puso la cogida que sufrió un hombre de unos treinta años de edad, con cuatro cornadas que obligaron a su traslado urgente hasta el hospital de Medina del Campo. Allí fue intervenido quirúrgicamente para quedar posteriormente ingresado.

En la recuperación de este encierro de  San Nicolás, el último de los que se celebran en el año en esta provincia,  ha jugado un papel  importante la Asociación Taurina de Madrigal.  Se trata de uno de los últimos acontecimientos taurinos que se  organizan en la Comunidad Autónoma de Castilla yLeón. Por este motivo la afluencia de visitantes es masiva. De hecho,  fueron  miles de aficionados se volvieron a concentrar en este singular encierro que recorre la calle El Tostado y la Plaza del Cristo, donde se han instalado las gradas. Fueron tres los toros que fueron soltados, dos desde los cajones y un tercero desde los toriles preparados para el evento. El presidente de la Asociación organizadora indicó que en la edición de este año se había superado las cifras de visitantes  que el evento taurino recibió el pasado año, cuando fueron en torno a 5.000 las personas que llegaron a la villa.

La Asociación Taurina de Madrigal se encarga de la organización de este evento taurino que cuenta también con la colaboración del ayuntamiento madrigaleño y la participación de los vecinos de Madrigal y más de 70 anunciantes.

Por la mañana las fiestas habían empezado con una misa en la iglesia de San Nicolás y la posterior procesión con la imagen del santo por las calles de la localidad.