Dani Pacho Martín es uno de los últimos en su 'especie', el último superviviente de aquel tenis abulense que llegó a tener cinco clubes –88 Torreones, Casa Social Católica, Club Tenis Ávila o Casino Abulense– en activo en la ciudad porque había para todos, que dominaba en Castilla y León y llamaba la atención en los campeonatos de España de Clubes, el que observaba con orgullo y expectación a dos pequeños como Paula Arias o Dani Rincón capaces de comerse el mundo, el que no dejaba de sacar adelante chavales uno tras otro... Hoy de todo aquello ya queda poco en la ciudad. Se ha agrietado el tenis abulense, como las pistas de la Ciudad Deportiva, pero no se agrieta el ánimo de DaniPacho, que sigue al frente del ClubTenis Paramera, el último que queda. Uno de sus fundadores, actual presidente, entrenador, gestor... «Lo que haga falta» comenta. Sigue al pie del cañón desde aquel mes de junio de 2010 cuando fundaron el club. «Cumplimos 14 años» dice junto a María López Montesano, quien le echa una mano. Porque son 7 días, 24 horas.Se suman su hermano IvánLópez Montesano y Joaquín Vaillo, dos campeones de Castilla y León, cuando el buen tiempo anima a muchos más a darle a la raqueta. Porque ahora mismo son 130 alumnos y socios.
Nació en Murcia. Una anécdota. Con 2 años regresaba a Ávila, su ciudad. «Mis padres eran de aquí, pero mi madre –maestra– había aprobado una oposición.En cuanto pudieron se vinieron». Tras pasar por Pablo VI y la Milagrosa, se marchó a estudiar EducaciónFísica. «Ya entonces lo compaginaba viniendo a dar clases los fines de semana». Se retiró rápido del mundo de la competición. «Podía haber llegado a más, seguro» pero desde joven se volcó con la enseñanza del tenis. «Vi que me gustaba mucho». Una de sus mayores alegrías se la apuntó siendo capitán en un Campeonato de España de Clubes. «Jugábamos contra chavales que ahora ves en profesionales» como ocurre con Alcaraz. «Ha sido cuando más he disfrutado. Fue cuando decidí que verdaderamente quería seguir con esto.Enseñar era lo que me llenaba».
Empezó a darle a la raqueta en el patio de su casa, aprendió en la Casa SocialCatólica y pasó al ClubTenis Ávila.Llegó un momento en el que entendió que debía tomar otro camino. Buscaba cosas diferentes. «Fue entonces cuanto fundamos el ClubTenis Paramera».Junto a él estaban Luis Rincón,María José Galán... Tenía 22 años y el tenis abulense pasaba por un momento muy dulce. El mejor. «Vivimos una gran época entre el 2014 y el 2018. Sacábamos muchos chavales.Se puede decir que dominábamos el tenis de Castilla y León».
Eran buenos tiempos. «Es cuando más he disfrutado. Ahora «cada vez es más complicado» dedicarse a esto de la raqueta y la enseñanza. «Cuando fundamos el club estaba El 88 Torreones, la Casa SocialCatólica, el Club Tenis Ávila o el Casino Abulense. Éramos cinco clubes.Ahora únicamente somos uno». Eso ya lo dice todo. No hay una respuesta única al por qué de esto. «Unos lo achacan a la división que hubo, otros a que los chavales se marchan con 15-16 años. Es verdad que el tenis es un deporte complicado, que requiere mucho esfuerzo y dedicación, pero yo creo que el motivo está en las instalaciones».