Alejandro Gallego antes era camionero pero hace 15 años, cuando se iba a jubilar, entre él y su hermano (que ya falleció) se embarcaron en el mundo de los desguaces y ejemplo de ello es el que tiene en Tiñosillos, el desguace Asoherga. La idea que tenían ambos al principio era «entretenerse un poco» pero «la cosa ha ido a más, hacia arriba».

La puesta en marcha de este negocio supuso comprar el terreno donde ahora está el desguace con una puesta en marcha que tuvo su trabajo, con los correspondientes proyectos y todo lo necesario hasta tener todo listo para esos 10.000 metros que ahora se ven llenos de coches, camiones y piezas.

Respecto a los clientes, es verdad que tienen de la zona, pero también de Madrid. En realidad «vienen de todos sitios, de Murcia, de Barcelona, de Valencia. Tenemos la ventaja de que desguaces de camiones no hay muchos». En su caso son un desguace de coches, camiones y también hay tractores. «Tenemos de todo», asegura.

No tiene ningún problema con estar en un pueblo, porque están tranquilos y «con internet estamos el cualquier sitio», lo que se une a «estos árboles, el aire puro con el que trabajamos todos los días». Es más, cree que no les perjudica en  nada su ubicación porque además los clientes les vienen por lo que habla la gente y, algunos, de internet. Eso sí, están pendientes de lograr un crecimiento porque se les está quedando algo pequeño. Pero de momento, se van manteniendo «bien».