Para el año que comienza, prevé, de nuevo, crecimiento de la actividad gracias a las franquicias líderes del Grupo y su estrategia centrada en digitalización, innovación y sostenibilidad. Por todo esto, "2024 volverá a ser un gran año para BBVA, con una mayor contribución al progreso económico y social", afirma.

¿Qué balance haces del año 2023? ¿Se han cumplido las expectativas que compartiste en el encuentro del año pasado?

Se han cumplido con creces. El año pasado anticipaba que el año 2023 sería un año de crecimiento, sería un año de generación de oportunidades para el banco y para todos nuestros grupos de interés y así ha sido con creces, como digo. Destacaría sobre todo el incremento en nuestra contribución a la sociedad a través de la actividad que desarrollamos, porque hemos logrado hacer más actividad, con más clientes. Hemos incorporado al banco 11 millones de clientes nuevos, a los que damos un servicio que es muy importante en sus vidas o en sus negocios y eso nos ha llevado también a aumentar el crédito que crecía a ritmos del 8% a septiembre, y eso es financiación de proyectos vitales, de hipotecas, de financiación de pymes, de grandes empresas. Una parte importante además de esa financiación es financiación sostenible.

El presidente de BBVA, Carlos Torres Vila, durante la entrevista

Nos ha sorprendido este año, una vez más, el volumen de la oportunidad. Vamos muy por encima de la senda que nos hemos marcado como objetivo, que es una senda que, como sabes, hemos revisado al alza dos veces y vamos muy por encima de eso. Ha sido un año también de consolidación de BBVA como el banco de referencia de las empresas emprendedoras de alto crecimiento, a través de BBVA Spark, que también se ha expandido a países nuevos como Colombia y Argentina, además de España y de México. En definitiva, un muy buen año en el impacto de nuestra actividad en las sociedades donde estamos, a través precisamente, de nuestra actividad principal. En lo financiero, un año muy bueno también. Crecimiento de beneficio. Todavía no hemos publicado el año completo, pero a septiembre crecía a ritmos del 24%, con ratios de rentabilidad, de eficiencia a la cabeza de Europa y una sólida posición de capital. Y todo esto se traduce en buenas noticias para nuestros accionistas.

Es un año en el que además hemos hecho recompras de acciones. Una parte de esa recompra ha sido extraordinaria, 1.000 millones de recompra extraordinaria. Desde que empezamos a hacer recompras de acciones, hemos reducido el número de acciones en un 12%, que es una cifra muy relevante. Y, por tanto, con un beneficio creciente, con un número de acciones que progresivamente se va reduciendo y una política de distribución de dividendos que se mantiene constante en distribuir entre el 40% y el 50% del beneficio, vemos cómo el dividendo por acción claramente va creciendo año tras año, y esperamos, todavía no tenemos la cifra definitiva del dividendo del año, que también el dividendo que paguemos a nuestros accionistas por el ejercicio 2023 sea claramente superior por acción al que fue el año anterior.

Y eso en Bolsa se traduce también en muy buen beneficio. Somos el banco que más se ha revalorizado en Bolsa en España en el año 2023, más del doble de revalorización que la media de nuestros competidores españoles, más del doble que la media de nuestros competidores europeos también. Y si tenemos en cuenta la revalorización de la acción y los dividendos, el incremento de valor por acción para cada uno de nuestros accionistas en el año 2023 ha sido del 57%.

Y de cara a 2024, ¿qué perspectivas tiene el banco en sus principales mercados? ¿Qué palancas tiene de cara a una posible bajada de los tipos de interés?

Sí, la previsión que tienen los mercados es que los tipos de interés vayan paulatinamente reduciéndose. Es verdad que nadie prevé que se reduzcan a los tipos ultra bajos que hemos visto en la última década, sino a tipos más normalizados. Vemos que la actividad va a continuar creciendo, más ralentizada que en los últimos años, pero creciendo. En España, por ejemplo, prevemos un incremento de actividad económica del 1,5%, más baja que la del año 2023, pero crecimiento.

En otros países, como México, prevemos un crecimiento más importante, cercano al 3%. En México, estamos viendo muy buen comportamiento del consumo y un beneficio importante asociado a las tendencias geopolíticas de acercar las cadenas de valor a los mercados. México se ve muy favorecido por formar parte del mercado integrado con Canadá y con Estados Unidos, y eso es una fuente importante de crecimiento, aparte del potencial que tiene el país dada la baja bancarización. En otros países como Turquía, vemos que ha habido un giro radical en las políticas económicas para corregir los desequilibrios, incluida la política monetaria, y que también tiene un gran potencial a largo plazo por la demografía, por su situación geográfica, también por la baja bancarización que hay en Turquía. Y en América del Sur, sí será un año de crecimiento más ralentizado, pero vemos también potencial a largo plazo.

Más allá del contexto, en BBVA tenemos unas franquicias líderes, que es la mayor fortaleza, unas franquicias que siguen año tras año demostrando cómo pueden captar clientes, como acabo de decir, extendiendo su actividad y teniendo impacto positivo en las sociedades. Y esa es la mejor forma de contrarrestar cualquier entorno que pueda venir, junto con la estrategia que tenemos, que es una estrategia ganadora en torno a la innovación y la sostenibilidad, que han sido los dos ejes que nos han caracterizado estos últimos años y en los que seguiremos trabajando también a futuro. En definitiva, 2024 volverá a ser un gran año para BBVA, en el que seguiremos creciendo, seguiremos teniendo impacto positivo en las sociedades en las que estamos, contribuyendo al progreso económico, al progreso social de todas ellas.

Precisamente, una parte de la sociedad en países como España no ve con buenos ojos estos resultados. ¿Qué opinas?

Creo que tenemos que dejar de ver mal que las empresas sean rentables, porque lejos de ser algo malo, es algo bueno para la sociedad, que conduce a que la sociedad prospere. Y eso es especialmente verdad en el caso de los bancos por la especial labor que llevamos a cabo. Uno de los factores que más contribuye al desarrollo económico y social a largo plazo de las sociedades es la inversión privada. La inversión privada genera crecimiento económico y progreso.

Pero para que haya inversión privada hace falta financiarla. La financiación la proveemos los bancos y, para que los bancos podamos llevar a cabo esa labor de financiación, necesitamos tener una rentabilidad, necesitamos atraer capital que permita que financiemos la inversión y el capital sólo viene si hay una rentabilidad. Por eso, cuanto más somos capaces de crecer nuestra actividad, más impacto positivo tenemos en las sociedades en las que estamos. Y eso lo podemos ver de distintas formas. Una sería viendo a dónde van nuestros ingresos. De forma muy sencilla, la mitad de lo que ingresamos lo dedicamos a tres cosas: a pagar el sueldo de las 120.000 personas que trabajamos en el banco, a pagar a nuestros proveedores, que también es generar actividad económica en la sociedad, y a hacer frente a las provisiones de crédito.

La otra mitad de los ingresos, que sería el beneficio antes de impuestos, se distribuye aproximadamente como sigue: un tercio aproximado lo dedicamos directamente a pagar impuestos; otro tercio lo devolvemos, se lo devolvemos a nuestros 800.000 accionistas, muchos de ellos, familias y pequeños ahorradores. Y el tercio final aproximado lo dedicamos a reinvertirlo en el negocio para que podamos seguir creciendo nuestro crédito y seguir teniendo impacto positivo. Y la capacidad de impacto positivo que tenemos es algo muy motivador de cara al año 2024, es algo que me hace estar muy orgulloso de trabajar en BBVA y también muy orgulloso de todos los compañeros que trabajan en el banco, a quienes me gustaría agradecer por su esfuerzo diario, por su apoyo constante a los clientes y por contribuir con su trabajo al progreso económico y social de las sociedades en las que estamos, en todos los países en los que estamos.

Otra de las grandes preocupaciones sociales es el cambio climático. ¿Cuáles han sido los avances del banco en su estrategia de sostenibilidad y qué va a marcar la agenda sostenible en 2024, tanto para el sector financiero como para BBVA?

Lo primero que diría es que la descarbonización se está mostrando como una oportunidad de negocio muy superior a la que imaginábamos, porque trasciende fronteras y porque afecta a todos los sectores de actividad. Y eso lo hemos visto en el año 2023, con volúmenes crecientes y por encima de lo que pensábamos que íbamos a tener y pensamos que va a ser lo mismo en los años venideros. Más allá de eso, en el banco tenemos un objetivo de tener cero emisiones en el año 2050, que se ha traducido en objetivos concretos de descarbonización para el año 2030 en ocho sectores, los más intensivos en emisiones que tenemos. Este año hemos añadido dos a esa lista: el sector de aviación y el sector de transporte marítimo.

También en el banco hacemos inversiones en fondos punteros de tecnologías limpias para estar cerca de esos desarrollos y poder luego financiarlos, tratando de replicar el éxito que tuvimos en las inversiones, y que seguimos teniendo, en las inversiones en fondos de fintech. Y con todo esto, pues, el banco también ha reforzado su posicionamiento como un banco referente líder en sostenibilidad. Por cuarto año consecutivo, somos el banco más sostenible de Europa, según el Dow Jones Sustainability Index. Y mirando a futuro, me preguntabas por tendencias. Una muy clara que vemos es cómo esta oportunidad afecta a todos los sectores, no sólo a las grandes empresas, también a las pequeñas y a toda la sociedad, cómo eso se va extendiendo. Esa universalización requiere una industrialización de las soluciones que proveemos, de la capacidad de venta, una mayor capilaridad, como ya vemos que tenemos la posibilidad de canalizar producto sostenible a través de nuestras redes de venta. Y una tercera tendencia importante a nivel global es la importancia que se le va dando al capital natural y a la biodiversidad, la necesidad de preservar, incluso de restaurar y recuperar ese capital natural y la biodiversidad. Esas serían las tendencias que vemos.

Y por último, en el campo de la innovación, ¿cómo podrá BBVA diferenciarse de sus competidores en un entorno tan competitivo?

Si algo define a BBVA es su apuesta por la innovación, que ha sido marca de la casa durante muchos años y que nos ha dado grandes alegrías. Tenemos muchos ejemplos: la mejor app del mundo y cómo esto nos lleva a crecer el negocio; también en la sostenibilidad, donde hemos sido muy innovadores; y ahora lo que vemos es que podemos seguir por ese camino aprovechando la tecnología y los datos, tecnologías que están creciendo mucho y desarrollándose mucho. Por ejemplo, la inteligencia artificial, para dar el siguiente paso en el asesoramiento a nuestros clientes, ayudarles a entender mejor sus finanzas, a tomar mejores decisiones, a mejorar sus experiencias y también a utilizar la tecnología para abaratar los servicios porque podamos ser más eficientes y más productivos.

Para terminar, ¿alguna idea que quieras destacar?

La que hemos venido comentando a lo largo de la entrevista, 2024 volverá a ser un gran año gracias al posicionamiento del banco, a nuestra estrategia muy clara centrada en lo que acabamos de comentar, en la innovación, la digitalización y también en la sostenibilidad. Y a través de ese gran año vamos también a poder incrementar nuestra contribución positiva al progreso, al desarrollo económico y social de las sociedades donde tenemos presencia.