Por poco, pero no ha podido ser. Las donaciones de sangre en Ávila no superaron en 2023 las 5.000 que se habían marcado en la Hermandad de Donantes de Sangre. Y es que este viernes el Centro de Hemoterapia y Hemodonación (Chemcyl) acaba de hacer balance de lo que ha dado de sí el año pasado y lo cierto es que Ávila se quedó en las 4.921 por las 5.027 del año 2022.Es decir alrededor de un centenar de donaciones se ha quedado en el tintero y eso supone un retroceso superior al 2,2%. No es consuelo pero todas las provincias de Castilla y León, salvo Segovia, han dado un paso atrás.
A nivel general los castellanos y leoneses realizaron el año pasado un total de 108.640 donaciones de sangre, cifra que supone un ligero descenso del 0,91% con respecto al mismo periodo del año anterior, en el que se contabilizaron 109.636 donaciones, según el balance aportado por elChemcyl. De la cifra global de donaciones, 42.417 provienen de los puntos fijos establecidos a lo largo de toda la Comunidad, otras 55.655 de las colectas que organizan tanto el Chemcyl como las hermandades de donantes de sangre de la región, mientras que el resto corresponden a donación de hemoderivados (aféresis de plaquetas y plasmaféresis).
Como decíamos, por provincias Ávila registró esas 4.921 que son más que las que hubo en Soria (4.297), en El Bierzo (4.560) o en Zamora (4.659)
Muchas más registró, lógicamente Valladolid, con 25.526 o Burgos, con 19.112; aunque también León, con 11.173; Salamanca, con 11.765; Palencia, con 6.029; o Segovia, con 6.030.
Por lo que se refiere a la aféresis de plasma, ésta ha experimentado una destacada subida del 38,77 %, al pasar de las 5.938 plasmaféresis en el año anterior a 8.240 en 2023. El Centro de Hemoterapia y Hemodonación dispone de una unidad móvil a lo largo de este año 2023 para facilitar la colaboración ciudadana que se ha visto reflejada en las 745 colectas que se han realizado. Por provincias, el número de aféresis de plasma registrado a lo largo del año ha sido el siguiente: Ávila 507; El Bierzo 350; Burgos 1.249; León 953; Palencia 436; Salamanca 1.014; Segovia 435; Soria 496; Valladolid 2.367; y Zamora 433.
En general la evolución en este tipo de donación es buena y va al alza y en el caso de Ávila se queda más o menos como estaba en 2022 pues de 507 donaciones pasa a 506, no es significativo.
Desde elChemcyl hacen balance y afirman que «gracias a la solidaridad de los ciudadanos castellanos y leoneses», ellos pueden realizar «cada año, con todas las garantías de seguridad y calidad, su labor de coordinación y distribución de derivados de la sangre para atender las necesidades diarias de los hospitales de Castilla y León».
Recuerdan que la sangre donada se somete a un complejo proceso de separación en tres componentes principales (el denominado fraccionamiento), que son los glóbulos rojos, las plaquetas y el plasma, pues cada uno tiene unas características concretas y sirve para tratar distintos tipos de enfermedades.
Los glóbulos rojos se utilizan sobre todo en operaciones, trasplantes, anemias o hemorragias, mientras que las plaquetas se van a transfundir a enfermos de cáncer y leucemia, prevención y tratamiento de hemorragias o déficit en plaquetas.
Por su parte, el plasma se puede utilizar directamente en transfusión o destinarlo a extraer unas proteínas que se usan para el tratamiento de diversas enfermedades como la hemofilia, hemorragias, quemaduras, enfermedades del riñón, prevención de la enfermedad hemolítica del recién nacido, tratamiento de déficits inmunitarios, etcétera.