La alta contaminación del aire en Nueva Delhi, que forma una densa capa de esmog tóxico que cubre por completo la capital india, se mantuvo este miércoles en el nivel más alto de riesgo por segundo día consecutivo, y superó casi 60 veces los valores máximos recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La urbe de más de treinta millones de personas registró un índice de calidad del aire (ICA) de 440 a las 10:00 hora local (4:30 GMT), según datos de la Junta Central de Control de la Contaminación (CPCB, en inglés).
Este valor entra en la categoría "severa" de toxicidad del aire, la de mayor riesgo, y que puede causar incluso "enfermedades respiratorias en personas sanas con una exposición prolongada", según el protocolo del Ministerio de Salud de la India, que recomienda evitar las actividades físicas al aire libre.
La capital india amaneció como la ciudad más contaminada del planeta por tercer día consecutivo, según datos recopilados por la plataforma suiza especializada en la medición de la calidad aire, IQAir, con una concentración de partículas PM 2.5, las más dañinas para la salud, de 280 microgramos por metro cúbico de aire.
Esta cifra es casi veinte veces mayor que el nivel máximo recomendado por la OMS para un solo día.
Sin embargo, supera 56 veces los valores que la agencia de la ONU recomienda para una exposición más prolongada, como es el caso.
El pico de contaminación sigue a un comienzo de diciembre inusual para la ciudad, que registró unos datos de calidad del aire ampliamente mejores que en años anteriores, lo que permitió a las autoridades rebajar su plan de medidas restrictivas.
Pero el repentino incremento de la toxicidad del aire empujó a las autoridades a elevar esta semana al máximo las restricciones, que incluyen la vuelta a un modelo de clases híbridas en los colegios e institutos.
Nueva Delhi experimenta un grave aumento de la contaminación del aire todos los años coincidiendo con la llegada del invierno -que disminuye los vientos- y el festival hindú de Diwali, que es celebrado con el lanzamiento masivo de pirotecnia, pese a su prohibición.
Las autoridades estiman que el 38 % de la contaminación de Nueva Delhi se origina en la quema de rastrojos, una práctica utilizada por los agricultores de los estados vecinos.
Otras fuentes son las emisiones contaminantes de los vehículos o el polvo de la construcción.