En el corazón de Ávila, en uno de sus puntos neurálgicos por excelencia a la hora de hablar de cañas y tapas, la calle San Segundo, se encuentra Alvalacán Puerta del Alcázar, todo un clásico de la hostelería abulense que defiende con la cabeza bien alta la buena mesa y la hospitalidad de esta tierra.
Al frente de este 'tres en uno' de la hostelería (es bar, restaurante y hotel), se encuentra el matrimonio formado por Juan Carlos García Rodríguez y Alicia Carrera Adanero. Lo están desde hace 19 años, cuando decidieron, junto con los hermanos de Alicia, tomar las riendas del famoso Hotel Jardín, tras la salida de su hasta entonces propietario, Miguel. «Nos interesaba sobre todo por la ubicación», nos dice Alicia. Y no nos extraña: el Alvalacán mira de frente a la Puerta del Alcázar de la Muralla, de ahí el nombre, y al impresionante cimorro de la Catedral, unas vistas privilegiadas que se disfrutan aún más cuando se hace frente a uno de los platos que cada día salen de la cocina del rebautizado hace dos años, cuando Alicia y Juan Carlos se pusieron al frente de manera exclusiva, como Alvalacán. El porqué de ese cambio nos lo explican también Alicia y Juan Carlos: la palabra es la suma de las primeras letras de los nombres de sus tres hijos (Álvaro, Laura y Candela), un guiño muy personal para esa nueva 'etapa 2.0' en un establecimiento que ha sabido conjugar a la perfección la historia de su edificio del siglo XVII, la tradición de la buena mesa abulense y la modernidad de la cocina del siglo XXI.
Así que ahora, aquel «desactualizado» hotel, como recuerda Juan Carlos el negocio que asumieron hace 19 años, se ha convertido en punto de encuentro para abulenses y turistas, que acuden a disfrutar de la terraza del Alvalacán, abierta los 365 días del año, y en la que se puede degustar, por ejemplo, una de las especialidades de la casa: los huevos rotos con secreto dulce y picante. «Mucha gente viene exclusivamente a por ellos», nos dice Alicia.
Aunque, por supuesto, la oferta del Alvalacán es mucho más que esos deliciosos huevos rotos. «Conjugamos la comida tradicional y de mercado con toques modernos», apunta Juan Carlos, que habla de platos de toda la vida como el chuletón o las revolconas, imprescindibles en sus aperitivos, combinados con «toques de innovación» que los clientes siempre agradecen.
«Nos debemos al público y buscamos siempre productos de la zona», prosigue hablando Juan Carlos, que nos informa también de los cinco menús que tienen a disposición del público y de su «amplia carta».
«Tenemos muchos clientes de Ávila de toda la vida. Pero también, dada nuestra ubicación, muchos clientes de fuera, para los que si hace falta, hacemos de guía turísticos», sonríe Alicia.
DIRECCIÓN: Calle San Segundo, 38.
HORARIO: El Alvalacán Puerta del Alcázar abre todos los días de 12,00 a 17,00 horas y de 20,00 a 01,00 horas.
ESPECIALIDAD: De entre las deliciosas tapas que sirven en su terraza, la más demandada por los clientes es la de huevos rotos con secreto dulce y picante. «Mucha gente viene exclusivamente a por ella», nos dicen.