En una época en la que los propósitos por el año nuevo están a la orden del día, uno de ellos bien podría ser donar sangre o donar vida, que viene a ser lo mismo. De una 'simple' bolsa de sangre se obtienen glóbulos rojos, para anemias o hemorragias; plasma, para hemofilia, patologías de la coagulación, quemaduras, enfermedades del riñón o del hígado o prevención de alergias;glóbulos blancos, para defensa contra infecciones, o plaquetas, con usos como la oncología, por poner unos ejemplos. El salón de plenos del Ayuntamiento de Ávila acogió ayer una extracción colectiva de sangre a la que se sumaron diez personas, un par de ellas menos de las que habían acudido el día antes a la Delegación de la Junta. No son grandes números pero todo suma, especialmente en un inicio de año que suele ser complicado en este reto, siempre difícil, de mantener donantes y captar donantes nuevos, sobre todo entre la juventud.
El Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León ha lanzado en esta semana un llamamiento a la población porque siguen «con las reservas bajas» de todos los grupos sanguíneos, especialmente del O-, al que se apremia a donar «lo antes posible», pero también del A+ y del O+, al que se insta a donar en los próximos días.
El presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre de Ávila, Alejandro Reviriego, se suma a la petición, siendo consciente, eso sí, de que las actuales «no son las mejores fechas». En el caso de las colectas en instituciones no está acudiendo mucha gente porque hay muchos funcionarios «con días libres», pero todo donante es bienvenido y se agradece el esfuerzo de todos, sean novatos o veteranos.
«El año pasado fue algo flojo, casi todas las provincias de Castilla y León bajaron en el número de donaciones, Ávila entre ellas», recordó Reviriego, que explicó que en 2023 se registraron un centenar menos de bolsas, aproximadamente, que el año anterior. «Tenemos la población envejecida y la gente joven no acaba de animarse, es muy difícil», señaló el presidente de la Hermandad, que apuntó que la provincia se encuentra más o menos en la media nacional de donaciones, con 35 por cada mil habitantes. El balance de las donaciones de sangre del año pasado sitúa las cifras en 4.921, 106 bolsas menos que el anterior.
El foco se sigue poniendo en la gente joven. «El grueso de nuestros donantes tiene más de 40 años y necesitamos gente joven que coja el relevo», añadió, algo en lo que seguirán insistiendo en este año con las visitas a la Escuela Nacional de Policía o los institutos para recalcar la importancia de esta práctica.