Por segundo año consecutivo, el Ayuntamiento de Piedralaves ha apostado por la figura del guarda rural oficial, titulado por el Ministerio de Interior, con el objetivo de tener vigilado diariamente el monte de su término municipal, especialmente en la época de alto riesgo de incendios forestales.

Siempre al servicio del municipio y dotados con un vehículo pick-up con motobomba, «son un apoyo para los demás agentes forestales, con los que siempre están en contacto», explican desde el equipo de gobierno municipal.

Este verano, en el que como cada año la población se ha visto aumentada considerablemente y, en consecuencia, multitud de personas han paseado para disfrutar de su entorno natural privilegiado y pueden darse un baño refrescante por las pozas de la garganta Nuño Cojo, la figura de guarda rural está siendo especialmente importante para la vigilancia y control de los montes.

En sus múltiples actuaciones diarias realizan trabajos de limpieza y desbroce, prestan su ayuda a ganaderos, excursionistas y con el teléfono que este año les ha dotado el Ayuntamiento, a todas las personas que han necesitado de sus servicios.

Destacan desde el Ayuntamiento la intervención, junto con agentes, en la decomisión de un aparato inflamable cuyo uso está prohibido en el período estival. También  aprovechan para denunciar la cantidad de mascarillas que han recogido en caminos y espacios naturales, y que son muy contaminantes.