Castilla y León superó ya el pico de infecciones respiratorias agudas, al presentar una incidencia de 929 casos por cada 100.000 habitantes, ya por debajo del millar, en la tercera semana del año. No obstante, espera que la próxima o la siguiente se registre el máximo de casos graves e ingresos hospitalarios por el "decalaje" con el que se producen, de acuerdo a la información de la Consejería de Sanidad recogida por Ical.

En ese sentido, la directora general de Salud Pública, Sonia Tamames, explicó que la incidencia de infecciones respiratorias agudas registrará un descenso "paulatino" en las próximas cinco o seis semanas, hasta colocarse en un nivel "bajo", de acuerdo al último informe disponible de la Red VIGIRA en Castilla y León. "No se espera que la afectación recupere niveles ni moderados, ni altos ya", dijo.

Asimismo, en esta temporada el virus de la gripe es el "protagonista" en las infecciones, con una tasa de 155 casos por cada 100.000 habitantes, frente a los 219 de la semana pasada. Además, continúa el descenso de la circulación del Virus Respiratorio Sincitial (VRS) y aumenta la actividad infecciosa de los rinovirus y del metapneumovirus.

Al respecto, fuentes de la Consejería de Sanidad precisaron que ayer martes fueron atendidas un total de 3.183 urgencias en el conjunto de hospitales, frente a 3.239 del lunes día 20. De esta forma, la ocupación media de camas en los 14 hospitales de Sacyl es del 72,3 por ciento, apenas siete décimas por encima del dato de la semana pasada, con 1.959 libres. 

Asimismo, han atendido en los últimos siete días a un total de 20.707 urgencias, frente a 22.172 del cómputo de la semana pasada. De ellas, requirieron ingreso únicamente 3.228 (3.346 hace siete días), si bien solo 852 de ellas tenían relación directa con el aparato respiratorio (988 la semana pasada).