La plaza de San Francisco luce ya su nueva imagen, tanto de día como de noche, una vez culminada su remodelación, la cual ha dejado plenamente satisfechos a los vecinos, según reconocía este lunes Teodoro del Canto, secretario de la Asociación de Vecinos de la Zona Norte - El Seminario, en el transcurso de la visita que realizó a este espacio el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera.
Acompañado de varios concejales y de representantes de la asociación de vecinos, Sánchez Cabrera comenzó por mostrar su agradecimiento a las distintas áreas municipales que se «han implicado para poder sacar adelante este plaza de San Francisco», con una remodelación integral que ha afectado a 4.600 metros cuadrados y en la que se han invertido 1,3 millones de euros. El alcalde recordó que «ha sido el Ayuntamiento de Ávila el que ha ejecutado este obra, confinanciada con fondos Next Generation, Edusi y también con la colaboración de la Fundación ACS para mejorar la accesibilidad del auditorio de San Francisco».
La remodelación ha permitido transformar «una plaza que estaba muy antigua, muy obsoleta» incorporando «un nuevo mobiliario urbano más atractivo, novedoso y más accesible para aquellas personas que tienen movilidad reducida». En este sentido, han incorporado un recorrido para personas invidentes, entre otras medidas. A su vez, al espacio se le ha añadio más vegetación, «de tal manera que este verano, los vecinos puedan disfrutar de sombra». Ytambién se ha mejorado la accesibilidad al auditorio, si bien el alcalde reconoció que «aún queda pendiente buscar una solución a la puerta».
Una nueva plaza de día... y también de noche - Foto: David GonzálezEspecial hincapié se hizo en el tema de la iluminación, donde también se ha hecho «una intervención importante». Sánchez Cabrera explicó que «esta plaza carecía de la iluminación necesaria para poder dar ese imagen de seguridad que reclamaban los vecinos» y se han instalado unos báculos que permitirán una mejor visibilidad tanto en la plaza como en los soportales de los edificios aledaños.
Con esa nueva iluminación consideran que se pueda llevar a cabo un mejor control del botellón. Sobre esta cuestión, Teodoro del Canto apuntó que «aquí puede venir todo el mundo, pero que se porten como Dios manda. Que respeten las cosas es lo que hay que hacer».