La emigración de abulenses a Madrid es tan vieja como la propia atracción que suponía ser aquella la vecina capital del reino, llena de oportunidades. Hasta no hace mucho, eran más de 100.000 los abulenses que tenían fijada su residencia en el principal foco de emigración de nuestra provincia, si bien la cifra se redujo a 80.000 a mediados del siglo XXI, con 54.000 de ellos en la propia capital. Seis años después la cifra se quedó en 46.138 empadronados en el Ayuntamiento madrileño, según datos facilitados por su departamento de Estadística, aunque muchos más lo hacían en su área de influencia.
Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística indican que en Madrid están empadronadas 84.226 personas nacidas en la provincia de Ávila, datos de población que la sitúan como la cuarta que más oriundos aporta a la capital de España, por detrás de los toledanos, los llegados de Ciudad Real y los pacenses, aunque sigue siendo la primera de todas las provincias españolas en porcentaje aportado a Madrid del total nacidos en origen.