Un año más, la diócesis de Ávila se ha adherido a la propuesta de la Junta de Castilla y León (junto al resto de diócesis de la comunidad) para poner en marcha el programa de apertura extraordinaria de monumentos en verano. En total, 37 iglesias, santuarios y ermitas de la capital y la provincia abren ya sus puertas hasta el mes de septiembre con el objetivo de que tanto los abulenses como los visitantes puedan acceder a templos que, o bien no suelen estar abiertos para el turismo, o están abiertos sólo unas pocas horas. Esta iniciativa comenzó el sábado 13 de julio y se prolongará hasta el 8 de septiembre, con un horario general de apertura de los templos de 11,00 a 13,30 horas y de 17,00 a 20,00 horas, salvo cuando se especifique otro horario distinto.
Una iniciativa que no se hace solo en verano, sino también en Semana Santa, y que se materializa a través del voluntariado, pues de otro modo sería difícil poder mantener los espacios abiertos, subrayan desde el Obispado. El programa de apertura de monumentos en verano se presenta, un año más, como una gran oportunidad para descubrir la importancia patrimonial de la iglesia abulense, una riqueza que habla de historia y de raíces. En ese catálogo monumental hay cosas muy interesantes por ver y descubrir que merece la pena conocer, valorar y aprender de ellas.
Si nos fijamos en la capital abulense, dentro de la ruta de 'Ciudades Patrimonio Mundial' aparecen propuestas tan interesantes como la iglesia de San Martín o la ermita de Nuestra Señora de la Cabeza, que no suelen estar abiertas al turismo, así como la ermita del Humilladero. Pero destaca especialmente la iglesia de San Andrés, una joya del románico español y de las más desconocidas de la ciudad de Ávila, pues no suele estar abierta al turismo de forma habitual. Una maravilla artística a la que se le despojó de los aderezos barrocos y que muestra un románico limpio. Por eso es muy interesante visitarla y disfrutar de sus capiteles, de sus naves y ábsides, que por fuera se pueden ver habitualmente, pero ahora se pueden contemplar también interiormente. Son, sin lugar a duda, los mejores capiteles románicos que se conservan en la ciudad, señalan desde el Obispado. La ermita de San Segundo y la de Nuestra Señora de las Vacas también se incluyen en esta ruta.
En la provincia destaca la zona sur, la cual capta mucho turismo en estas fechas. Por eso se ve muy positivo el hecho de que se ofrezca la posibilidad de disfrutar de iglesias tan bonitas como la de San Esteban del Valle (iglesia de San Esteban Protomártir), Mombeltrán (iglesia de San Juan Bautista, únicamente abierta de 16,30 a 19,30 horas) o Arenas de San Pedro (iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, solo disponible de 10,00 a 14,00 horas). En el capítulo 'Sierras del Sur' se incluyen otros 19 templos que abren por vacaciones: los de Villarejo del Valle (iglesia de San Bartolomé), El Hoyo de Pinares (iglesia de San Miguel Arcángel), Piedrahíta (iglesia de Santa María la Mayor, de 12,00 a 13,30 h. y de 18,00 a 20,30 horas),Burgohondo (abadía de Nuestra Señora de la Asunción), El Barco de Ávila (iglesia de la Asunción de Nuestra Señora),El Tiemblo (iglesia de la Asunción de Nuestra Señora), Lanzahíta (iglesia de San Juan Bautista),Pedro Bernardo(iglesia de San Pedro Ad Vincula),Cebreros (iglesia de Santiago Apóstol),LasNavas del Marqués (iglesia de San Juan Bautista), Candeleda (iglesia de la Asunción de Nuestra Señora), Aldeavieja (iglesia de San Juan Bautista),Tornadizos de Ávila (iglesia de San Miguel Arcángel),Casavieja (iglesia de San Juan Bautista),La Horcajada (iglesia de Nuestra Señora de la Asunción),Navalperal de Pinares (iglesia de Nuestra Señora de la Asunción),El Barraco (iglesia de la Asunción de Nuestra Señora),Piedralaves (iglesia de San Antonio de Padua) yLa Adrada (iglesia del Salvador).
en la moraña. Sin embargo, la oferta es muy extensa y llega también al norte de la provincia, con el llamado plan 'Mudéjar al sur del Duero'. Entre todas las propuestas de la Moraña destacan las iglesias de Arévalo (San Miguel, San Juan, Santa María, El Salvador y San Martín), unas maravillas del arte mudéjar, aunque si el visitante se acerca a Madrigal de las Altas Torres también podrá contemplar Santa María del Castillo, cuyo ábside ha sido recientemente restaurado. La iglesia de San Cipriano y la iglesia de San Juan de la Cruz en Fontiveros o el magnífico retablo gótico de Fuente el Sáuz (iglesia de la Asunción de Nuestra Señora) son otros 'tesoros' a contemplar en el marco de esta propuesta.
Pero este programa de la Junta, todo un clásico del verano, no está pensado solo para el visitante. El vecino también puede descubrir o redescubrir iglesias cercanas o lejanas. La gente que vuelve a sus pueblos de origen, por ejemplo, puede aprovechara un hueco para parar a visitar la iglesia del núcleo de al lado o para hacer planes dentro de pequeñas escapadas que le acerquen a ese patrimonio que hemos ido forjando entre todos, que está ahí para uso litúrgico, pero también para disfrute de la ciudadanía en general.
Y es que la Iglesia y las diócesis cuidan un patrimonio cristiano que está abierto para el deleite de todos, sean o no creyentes. Esto se observa, por ejemplo, en Ávila capital, a donde llegan visitantes de todos los rincones del mundo, y, no pocas veces, de culturas distintas a la nuestra, y se acercan a contemplar el patrimonio desde el punto de vista artístico, cultural e histórico.