Medidas excepcionales en Navalmoral para controlar el agua

B.M
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Ante el excesivo consumo, que se cree que se normalizará en 4 ó 5 días, se prohíbe llenar o reponer agua de piscinas, regar huertos y jardines y lavar coches

El Ayuntamiento de Navalmoral de la Sierra se ha visto obligado a adoptar «medidas excepcionales» ante el excesivo consumo de agua en la localidad, una situación que esperan que desaparezca en 4 ó 5 días, según explica su alcalde, Juan Lorenzo Herranz.

El problema es que el excesivo consumo de agua potable supera la capacidad diaria de la planta potabilizadora del municipio y por eso, para asegurar el abastecimiento de agua para consumo, se adoptan una serie de medidas que llevan a prohibir el llenado o reposición de las piscinas con agua de abastecimiento público así como regar huertos y jardines (se puede hacer con pozos propios) y el lavado de vehículos. También se pide controlar el consumo habitual de agua por lo que se hace una llamada a un uso responsable en domicilios y empresas.

Se toman estas decisiones, que han sido comunicadas por bandos, después de que hace unos días se pidiera a los vecinos ese uso responsable pero no se haya conseguido evitar ese mayor consumo.

Explica el alcalde que la localidad cuenta con una potabilizadora que es una «joya» y que tiene capacidad para unas 3.500 personas. Aunque ahora hay en el pueblo unas 2.200, el consumo de agua se ha disparado a casi 800 metros cúbicos cuando con la misma población el pasado año estaba en 480.

Los picos de consumo han llevado a hacer algo «lógico» como tomar medidas excepcionales para garantizar el consumo y mantener el agua potable dentro de una potabilizadora en la que se hacen controles diarios y además se pasó una inspección de Sanidad el pasado 8 de agosto «favorablemente». «Desde el Ayuntamiento se trabaja constantemente para que toda el agua que llega a los consumidores sea de buena calidad», insiste el alcalde, que reconoce que sí que hay una «tonalidad algo amarilla» (que no está al salir de la planta)  en el agua que «se corregirá cuando volvamos a consumos normales». Además de los bandos, el propio Ayuntamiento ha explicado la situación a través de las redes sociales, señalando que «el agua de la red de abastecimiento a fecha de hoy sigue siendo apta para el consumo. En algunos tramos del día el agua y en algunas zonas puede verse con algo de tonalidad, situación que se produce por el cambio de velocidad del agua dentro de la red de suministro, producido por los numerosos ajustes diarios de las válvulas para controlar el gasto y evitar vaciar las tuberías para prevenir en lo posible averías que empeorarían la situación». 

Indica el comunicado que esto se debe «al excesivo consumo de agua potable, que supera la capacidad diaria de la planta potabilizadora del municipio» por lo que se trabaja para «normalizar la situación», lo que «ocurrirá cuando el consumo se estabilice a niveles normales de población. Estamos produciendo agua potable diaria para una población estimada de 4.000 personas, una cifra muy superior a la población real. Durante la madrugada el consumo de agua pasa a ser normal pero pasado este horario se dispara» por lo que se pide ese uso responsable.

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