Los 1.094 beneficiarios en la provincia de Ávila de las ayudas de alquiler de la Junta de Castilla y León de 2022, resueltas hace unos días, podrán optar a las nuevas ayudas de 2023 que ya están convocadas con una nueva vía de solicitud, más rápida y accesible y denominada de Renovación, que les permitirá poder presentar solo los recibos bancarios de los pagos del alquiler de este año, siempre eso sí que no hayan cambiado sus datos y sus circunstancias respecto a la anterior solicitud. De esta manera, la Junta de Castilla y León espera agilizar la concesión de estas subvenciones con el objetivo de intentar tener resuelta la convocatoria en seis meses. El plazo para presentar las peticiones arrancará el 1 de diciembre y estará abierto hasta el 15 de enero, en el marco de una convocatoria que trata de "facilitar ese derecho a la vivienda" y que "mantiene las mejoras impulsadas en 2022", entre ellas el aumento de las cuantías de las ayudas.

Así lo aseguró este miércoles en Ávila la directora general de Vivienda, Arquitectura, Ordenación del Territorio y Urbanismo de la Junta de Castilla y León, María Pardo, en una convocatoria en la que ofreció los datos más destacados de la convocatoria de 2022, ya resuelta, y de la de 2023, que está a punto de dar sus primeros pasos. En Ávila se acaban de conceder 1.094 ayudas a otras tantas familias por un importe cercano de 2 millones de euros, el 7,6% de todo lo desembolsado en la comunidad, más de 29 millones. En la provincia se han aprobado el 61% de las solicitudes recibidas, "todas las que cumplían los requisitos", señaló María Pardo, el elemento "diferenciador", a su juicio, de las ayudas de la Comunidad respecto a la de otros territorios.

Desde el año 2014 esta línea de ayudas ha ido "evolucionando a mejor", lo que ha permitido llegara 91.000 familias que han recibido 147 millones de euros en toda Castilla y León, con más de 7.400 familias beneficiadas en Ávila por un importe superior a los diez millones de euros. 

El perfil del beneficiario en Ávila es un hombre, aunque en Castilla y León lo piden más las mujeres. Hay, además, un 26% de jóvenes menores de 36 años que se benefician del aumento del porcentaje de ayudas para este colectivo, porcentaje que se queda en el 23% en Ávila, al registrarse 252 peticiones de jóvenes. 

Y es que, según recordó la directora gneral, si en 2021 se otorgaba hasta el 40% del precio del alquiler a los solicitantes que cumplían los requisitos (básicamente de renta) y hasta el 50% en el caso de los menores de 35 años, a partir de 2022 "el porcentaje que se abona es superior, el 50% del importe del alquiler para todos los ciudadanos, el 60% en el caso de los menores de 36 años y hasta el 75% si están afincados en el medio rural",porcentaje este último que también se contempla para familias vulnerables sobrevenidas. Con carácter general los beneficiarios no pueden ganar más de tres veces el IPREM, lo que supone unas rentas de 23.700 euros al año, aunque el umbral aumenta si se trata de personas con discapacidad o familias numerosas. María Pardo también recordó que "se ha subido el tope de las rentas de alquiler" que pueden entrar en las ayudas por la subida del IPC, de entre 450 y 550 euros (en función de dónde vivan), y que se ha incluido por primera vez a personas que alquilan habitaciones. Del mismo modo también se ha ido aumentando el presupuesto anual que se dedica a esta convocatoria para poder llegar a "todos los que se convierten en titulares de este derecho subjetivo". 

A todo esto se unen las ayudas del bono de alquiler joven, que este año recibió 16.000 solicitudes y, por tener su crédito limitado, solo llegó a tres mil jóvenes.

El delegado de la Junta en Ávila, José Francisco Hernández Herrero, destacó la importancia de esta línea de ayudas y las mejoras introducidas por la administración para que "a la idoneidad de las ayudas se una la facilidad de acceso a las mismas en un claro ejercicio de eficiencia".