La Diputación recuerda a Vasco de la Zarza en su V Centenario

D. Casillas
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Conferencias sobre su vida y obra y visitas, una de ellas a la Catedral para conocer su obra más célebre, llenan un programa que se desarrolla los días 26 y 27 de septiembre

La Diputación recuerda a Vasco de la Zarza en su V Centenario

Vasco de la Zarza –nació en fecha indeterminada del último tercio del siglo XV y murió en Ávila el día 21 de septiembre de 1524– fue uno de los más grandes escultores de principios del siglo XVI, un tiempo fructífero en el que aunque realizó obras para varias localidades (Segovia, Valladolid, Toledo, Olmedo, Cuéllar…) la mayor parte de su producción fue para la Catedral y conventos de la capital abulense.

El poderoso obispo Carrillo de Albornoz, titular de la seo abulense desde finales del siglo XV, fue el gran mecenas de Vasco de la Zarza, una relación intensa que derivó en que el artista trabajase fundamentalmente para la Iglesia, aunque también, en lógico paralelismo, tuvo tiempo para hacerlo para otros adinerados abulenses del momento.

Para reivindicar la memoria de tan grande artista, justo al cumplirse el V Centenario de su muerte, la Diputación Provincial de Ávila ha organizado las Jornadas Vasco de la Zarza y su tiempo, un acercamiento a la obra y la vida del escultor que se desarrollará, con la colaboración del Archivo General Militar, Fundación Ávila y la Diócesis de Ávila, los días 26 y 27 de septiembre.

El presidente de la Diputación, Carlos García, presentó este programa, acompañado por el director de la Institución Gran Duque de Alba, Maximiliano Fernández; Javier González, diputado de Cultura; el profesor Raimundo Moreno, coordinador de la actividad, y Fernando Rodríguez-Piñero, comisario del Año Vasco de la Zarza, que se abre el jueves 26 a 17,00 con un acto inaugural en el Palacio de Polentinos, al que seguirá una conferencia sobre 'Arquitectura y arte abulense en el tiempo de Vasco de la Zarza', ofrecida por Raimundo Moreno. 

Esta primera jornada continúa, a las 19,30, con una visita al palacio de Polentinos y a los restos de la iglesia de Santo Domingo, dirigida por la profesora de la USAL Isabel López, para cerrarse a las 21,00 horas con un acto muy especial que va a dar el pistoletazo de salida a las celebraciones del Año Vasco de la Zarza con será protagonizado por  esta serie de celebraciones que van a contar con la participación de Daniel Quirós, locutor de Radio Nacional de España, y del organista de la Catedral, Francisco Javier López.

segunda jornada. La dinámica del día siguiente, con sede en el Palacio los Serrano, será similar: una conferencia a las 17,30 horas, en este caso a cargo del profesor y doctor en Historia Serafín de Tapia, que hablará sobre 'La ciudad de Ávila en el tiempo de Vasco de la Zarza', clausura a las 18,30 y una visita a la obra de Vasco de la Zarza en la Catedral, dirigida por el profesor Ismael Mont.

El presidente de la Diputación manifestó que el objetivo de estas Jornadas es «la celebración del quinto centenario del fallecimiento de Vasco de la Zarza, para dignificar todas y cada una de las esculturas que él hizo y, por qué no decirlo, para situar a la escultura abulense a nivel internacional». Además, añadió, de la mano de expertos en la materia «la Diputación rinde homenaje y reconoce a un abulense universal que talló esculturas tan importantes como el sepulcro de 'el Tostado» en la Catedral», además de «otras esculturas en las Gordillas, en Santo Tomás y en provincias vecinas como Segovia y Valladolid».

Raimundo Moreno manifestó su idea de que Vasco de la Zarza «es, como decía el presidente, un escultor de talla nacional, y me atrevería a decir que incluso internacional por sus vinculaciones con Italia. Es además una figura en la que tanto la Diputación como la Institución Gran Duque de Alba se vienen interesando ya desde hace años, con numerosas publicaciones». Todo ello responde, añadió, a la relevancia de un artista que «era un gran conocedor de la arquitectura y de la escultura tardogótica en Ávila, que fundamentalmente se desarrolla en torno a las figuras de Juan Guás y de Martín Ruiz de Solórzano, y además es un muy buen conocedor e introductor del renacimiento italiano en Ávila, una de las cuestiones que le hace singular y verdaderamente importante en el panorama tanto de la arquitectura como de la escultura renacentista española».