Cristina Sánchez, casavejana, abandonó su pueblo para trabajar. Sin embargo, y a diferencia de la mayoría de los jóvenes de su quinta, ella regresó. Lo hizo hace 17 años, con su marido y para que su hijo creciera en el mismo pueblo en el que ella creció. «Yo le cuento a todo el mundo que vivo en un pueblo al que la gente va de vacaciones», afirma con orgullo para hablar de lo satisfecha que está de haber tomado la decisión de retornar a su tierra.
En Casavieja ella y José Luis, su marido, no solo encontraron el lugar perfecto para criar a su hijo, sino que aquí también han emprendido. Hace cuatro años, en plena pandemia, decidieron abrir La Casa de Pilar, en un local familiar y tomando el nombre de la madre de ella. Se trata de un negocio pionero en la comercialización de todo tipo de productos abulenses, no solo agroalimentarios sino también culturales y artesanos.
Poner en valor y promocionar los productos y artesanías de la provincia de Ávila es el objetivo de este negocio que cuenta tanto con tienda propia en Casavieja como con venta on line (www.lacasadepilar.es) y que también acude a distintas ferias y mercados, como así ocurre cada viernes en el Mercado Chico de Ávila.
Firmes defensores del comercio de proximidad, su tienda sirve de escaparate para promocionar las ricas viandas y las diferentes artesanías que se producen en esta provincia. Morcillas de Sotillo, bollos de Casavieja, queso de Elvira García de El Barraco, aceite del Valle del Tiétar, miel de Burgohondo, cervezas artesanas, vinos de toda la provincia, legumbres de El Barco de Ávila o pimentón de Candeleda son algunas de las más de cien referencias agroalimentarias de La Casa de Pilar, donde también hay guías de viaje de la provincia, libros de autores de la zona,o música tradicional del Tiétar y artesanía local.