La Oficina del Censo Electoral, ubicada en la Delegación Provincial del Instituto Nacional de Estadística, celebró este miércoles el sorteo de los 300 candidatos para formar parte de los jurados populares en los casos judiciales de los dos próximos años en Ávila. Fue el delegado provincial del INE, Ernesto de Antonio quien, acompañado por la secretaria de la Audiencia Provincial como fedataria, se encargó de activar la aplicación IDA-Celec, empleada para el intercambio de datos y aplicaciones del censo electoral entre la Oficina del Censo Electoral y otros organismos competentes por medios telemáticos, para llevar a cabo el sorteo, de manera automática, entre las 127.198 personas que componen actualmente el censo electoral en esta provincia (mayores de 18 años), 915 menos que hace dos años.
Esa lista bienal de candidatos a jurados resultante del sorteo, que tiene carácter provisional, debe ahora ser remitida por la Oficina del Censo Electoral, con los nombres completos y sus direcciones, a la Audiencia Provincial en el plazo de tres días para su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia y para su comunicación a cada uno de los interesados, y también será enviada a los ayuntamientos para su exposición durante los quince últimos días de octubre, pudiéndose presentar reclamaciones, dentro del periodo de excusas, en los juzgados decanos durante la primera quincena de noviembre.
Luego, con las reclamaciones que resulten estimadas, la Delegación provincial de la Oficina del Censo Electoral obtendrá la lista definitiva de candidatos a jurados en torno al 15 de diciembre, que será enviada a la Audiencia Provincial de Ávila.
Todo este procedimiento viene regulado por la Ley Orgánica 5/1995 del Tribunal del Jurado y precisamente ese año se celebró el primer sorteo de jurado en Ávila, según explicó Ernesto de Antonio, quien precisó que en 1996 tuvo lugar el segundo y desde entonces se viene celebrando cada dos años hasta éste que es el décimo sexto, en el que han sido elegidas 300 personas para la lista de candidatos a jurados, cien más que en el anterior.
Cabe recordar que para formar parte de un jurado es necesario ser español y mayor de edad, encontrarse en pleno ejercicio de los derechos políticos, saber leer y escribir, estar empadronado en cualquiera de los municipios de la provincia o comunidad en la que se ha cometido el delito y no estar física ni psíquicamente incapacitado para el desempeño del cargo.
Y para excusarse de ser jurado se debe alegar, entre otras cosas, ser mayor de 65 años, haber desempeñado funciones de jurado en los cuatro últimos años, que el desempeño del cargo cause graves trastornos como consecuencia de las cargas familiares, residir en el extranjero o desempeñar un trabajo relevante de interés general.
En el caso de que se vaya a celebrar un juicio con jurado, son 20 las personas de esa 'bolsa' de candidatos las citadas y se realiza una criba con los que presentan excusas legales para no participar y un grupo final es entrevistado por las partes, que va descartando personas hasta que confeccionan el tribunal, que debe quedar compuesto por once miembros, dos de ellos suplentes, que son quienes deberán emitir el veredicto.
Eso sí, ese veredicto no es como nos lo cuentan en las películas, declarando al acusado o acusada culpable o inocente, sino que responden a unas preguntas consensuadas por las partes y por el magistrado presidente que les acompaña durante todo el proceso y que será quien se encargue de redactar la sentencia.