La Federación de Servicios de CCOO prevé para la campaña de ofertas de final del año la creación de, al menos, 1.300 puestos de trabajo, al mismo tiempo que alertaron de un "alarmante" porcentaje de contratación fijo-discontinua en el comercio mayorista, mientras que el empleo temporal y la contratación a tiempo parcial predominará en el comercio minorista. Aseguraron que "no se garantiza" la estabilidad de las plantillas ni se consolidan las contrataciones finalizadas las campañas.

En un comunicado recogido por Ical, desde CCOO señalaron que el crecimiento de la renta de los hogares ha permitido la recuperación del volumen de ventas del comercio tras la pandemia y consolidar al sector como fuente de crecimiento de nuestra economía. Pero los datos económicos contrastan con los datos de creación de empleo, ya que las empresas "están cargando sobre las plantillas el aumento de la actividad para incrementar lo menos posible el peso de partida de costes laborales". 

Durante las campañas de promociones, además de "crearse empleo inestable", las condiciones de trabajo "se vuelven más exigentes", porque las empresas "pueden alegar necesidades productivas del sector" y aplican "medidas extraordinarias" de regulación de las condiciones laborales, como la "distribución irregular de la jornada, la realización de horas complementarias y/o extraordinarias, o la limitación de los períodos de descanso y vacacionales en estas fechas del calendario". En el comercio al por mayor en Castilla y León se realizan más de 9.200 horas extras semanalmente, de las cuales más de 4.000 no se pagan, añadieron.

"Maximizar los márgenes empresariales a costa de ajustar las cifras de personal, particularmente en los períodos de máxima actividad supone someter a las plantillas a cargas de trabajo excesivas y exponerlas a problemas de salud y seguridad en el trabajo", aseveraron.

Desde CCOO Servicios reivindicaron una política de contratación basada en la estabilidad que "reduzca sustancialmente los niveles de parcialidad y elimine el fraude en la contratación", así como mecanismos que impulsen la conciliación corresponsable y la reducción de los niveles de parcialidad femenina en el sector. Además de exigir el "cumplimiento riguroso" de la legislación sobre prevención de riesgos laborales, haciendo hincapié en la evaluación de riesgos psicosociales.