Con pancartas que incluían mensajes como ‘120 trabajadores en el punto de mira’, ‘No al ERTE’, ‘CGS en huelga’ o ‘Telvent, Schneider, cómplices; Aurelius, culpable’, la práctica totalidad de la plantilla de Ávila de la empresa CGS (Global Rosetta), la antigua Machmind, secundó este lunes la huelga de ámbito nacional convocada para mostrar la disconformidad con la deriva de la negociación del Expediente de Regulación de Empleo de carácter temporal (ERTE) planteado por la nueva dirección.
Pablo Martín, delegado de personal de la oficina de la empresa CGS en Ávila, explicó que una veintena de empleados del centro que se ubica en el polígono industrial de Vicolozano se unió a la huelga y la mayoría de ellos asistió a la concentración convocada a las puertas de la empresa a primera hora de la mañana para decir ‘no’ a la propuesta trasladada por la empresa, cuya negociación se lleva a cabo en Madrid. El planteamiento inicial implicó la suspensión de contratos durante 24 meses y, en el marco de la negociación, «bajaron a 18 meses y quitaron algunas condiciones menores», algo «insuficiente» para los empleados de CGS, que apuestan por que «una persona no pueda estar más de 6 meses en el paro» para que «la carga se reparta», detalló Pablo Martín.