Llega la Navidad, unas fechas de felicidad y para vivir rodeados de la familia y los amigos que sirven para hacer balance del año que termina. En ese recuerdo de 2024 la mente se nos va, irremediablemente a la catástrofe que provocó la DANA a finales de octubre. Una tragedia que ya va dejando a copar las primeras planas de los periódicos, pero que aún sufren quienes lo perdieron todo. Estas Navidades, por desgracia, no van a ser felices para todos los damnificados que, sin embargo, siguen recibiendo la colaboración desinteresada de muchos españoles.
Es el caso de Natalia González, una vecina de La Adrada que ha impulsado una recogida solidaria que se destinarán a los vecinos de Albal, uno de los municipios afectados por el temporal en la comarca de la Huerta Sur de Valencia. A través de las redes sociales ha conseguido movilizar a sus convecinos y a otros habitantes de la zona para que donaran los artículos que más necesitan ahora en Valencia: calefactores, deshumidificadores, mantas (muchas casas siguen casi en ruinas y sin calefacción en pleno inicio del invierno) y juguetes nuevos para tratar de animar a las Navidades a los niños afectados. La recogida cuenta con la colaboración de dos empresarios del municipios (Roberto Alcocer, propietario de la tienda Quad Ral, perteneciente a la asociación del conocido mecánico Ángel Gaitán, y el constructor Félix Carrasco) para el tema de la logística y el transporte de todo el material recolectado. Además, Natalia también solicitó ayuda al Ayuntamiento de La Adrada, de quien aún no ha obtenido respuesta.
La recogida de objetos permanecerá hasta este domingo 22 de diciembre, con la idea de que al día siguiente emprendan el viaje hasta Valencia para repartir todo lo recaudado justo con el inicio de la Navidad. Por el momento han recopilado 94 juguetes nuevos, 33 mantas, dos radiadores y una silla de ruedas, que Natalia organiza y guarda en su propio garaje. Eso sí, hasta que se cierre la campaña aún espera recibir más productos, como el caso de una mujer de Casillas que se ha ofrecido a donar todos los productos de su supermercado, que cierra por jubilación. "Yo hago esto voluntariamente y me encargo de ir personalmente a los domicilios", comentó Natalia, quien sigue recibiendo vídeos e imágenes de valencianos que lo han perdido todo (tiene un vídeo de una mujer de Paiporta en el que se ve que tiene la casa totalmente arrasada), situaciones que le animaron a crear esta campaña solidaria. Porque hacer el bien y ser humanitario no cuesta nada.
Hace ya casi dos meses que la DANA arrasó la Comunidad Valenciana y hay gente que aún no ha recibido las ayudas solicitadas. Por eso, iniciativas como la de Natalia son tan importantes para que los afectados no caigan en el olvido y puedan pasar unas fiestas lo más felices posibles, principalmente los niños, que se lo merecen.