"Ver a la UE como un enemigo de los agricultores es un error"

Agencias
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El ministro Planas sale en defensa de la PAC como un gran "instrumento de apoyo" al sector, al tiempo que muestra su preocupación ante la suspensión rusa de la exportación de cereales

El responsable en funciones de Agricultura, Luis Planas. - Foto: EFE

Coincidiendo con el comienzo de la Reunión Informal de Ministros de Agricultura comunitarios, un encuentro que servirá para abordar durante estos días los desafíos en materia agroalimentaria y que se prolongará hasta mañana en Córdoba, el titular de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, quiso salir ayer en defensa de la Política Agraria Común (PAC) por «ser uno de los mejores instrumentos de apoyo a agricultores y ganaderos».

«Ver a Bruselas, como leo a veces, como un enemigo de los agricultores es un error absoluto. La PAC es un tercio del presupuesto comunitario y uno de los mejores instrumentos de apoyo a agricultores y ganaderos», señaló el titular del ramo en una entrevista. En este sentido, detalló que -además de los 4.875 millones de euros a 30 de junio en ayudas- han conseguido «elevar el anticipo y a partir del 16 de octubre se van a desembolsar más de 3.500 millones, en función de lo que soliciten las comunidades».

El ministro defendió que «se puede discutir» sobre las políticas de la UE y es «lo que hacemos en el Parlamento y el Consejo de Ministros sobre las propuestas de la Comisión Europea y cómo ajustarlas a la realidad». «Evidentemente tenemos reivindicaciones, como las cláusulas espejo», señaló el responsable de Agricultura en relación a lo que significa que haya reciprocidad y que los productos que se importen de terceros países tengan las mismas exigencias medioambientales y sanitarias de la Unión. «Entiendo que haya cosas que no les gusten, pero el mundo gira y cambia, y tenemos que adaptarnos a él», sentenció.

Por otro lado, Planas también abordó en su entrevista la preocupación por la seguridad alimentaria mundial. Al respecto, recordó que la guerra de Ucrania, con la suspensión rusa de la salida de grano por el mar Negro, es una de las cuestiones que más impacto están teniendo en ella, además de los efectos de El Niño en el Pacífico o los conflictos comerciales entre China y Estados Unidos.

«Putin ha decidido hacer de la alimentación un arma de guerra, y no soy optimista sobre la reapertura del corredor. Ojalá me equivoque», aseguró, subrayando la importancia de conseguirlo no solo por solidaridad con el país sino por el «buen funcionamiento de los mercados internacionales», ahora mismo estables porque se espera una cosecha mundial de 2.297 millones de toneladas.

Sus afirmaciones se produjeron coincidiendo con el arranque del encuentro entre ministros de Agricultura de la UE, en Córdoba -en el marco de la Presidencia española-, en la que se abordarán las nuevas tecnologías al servicio de la producción alimentaria, con temas relacionados como la sequía, el agua o los productos fitosanitarios, entre otras cuestiones.