Aunque en el fútbol el estado de ánimo puede cambiar de un día para otro, tanto para bien como para mal, cuando pintan bien las cosas lo que toca es disfrutarlas, y en eso está el Real Ávila, instalado en la felicidad desde la noche del jueves cuando pasó la eliminatoria de Copa y también después de ganar el domingo al Llanera en el Adolfo Suárez, situaciones ambas que le hacen afrontar con el mejor ánimo posible la semana para preparar el encuentro del próximo domingo en El Helmántico, donde le espera un atractivo duelo contra el Salamanca UDS.
A pesar de este buen momento, que ha situado al conjunto encarnado en la tercera plaza de la clasificación, el entrenador abulense, Miguel de la Fuente, tras la victoria ante el Llanera volvió a recordar que el objetivo del equipo para esta temporada no es otro que el de la «permanencia. Yo no dije nada más que eso. Ese es el objetivo principal para un equipo recién ascendido como nosotros asentarse en la categoría y luego es cierto que tampoco vamos a renunciar a nada», ya que, como reconoce el técnico abulense, «ahora mismo estamos en una posición que nos da derecho a mirar hacia arriba. Miramos hacia arriba en la clasificación, pero con la humildad de saber que nuestro objetivo es el hecho de asegurar permanencia porque es lo que necesita el club, porque si no lo tienes presente, cuando te cambia el objetivo, si vienen mal dadas, cuesta muchísimo cambiar esa mentalidad». Por eso, De la Fuente transmite a todo el entorno del club que «seguimos en las mismas, intentando dar nuestra mejor versión y a ver hasta dónde nos llega. De momento nos llega para ser terceros y para tener 19 puntos. Vamos a por los siguientes tres y a partir de ahí iremos viendo hasta dónde podemos llegar».