El coordinador de Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández, afeó hoy a la Junta su decisión “unilateral” de paralizar temporalmente la vacunación con AstraZeneca hasta conocer el pronunciamiento de la EMA, por “contribuir a que haya dudas y miedo entre la ciudadanía a vacunarse”.
“Lo que menos necesita la ciudadanía a día de hoy es incertidumbre”, señaló Fernández en declaraciones recogidas por Ical, para a continuación criticar a la Junta por tomar una decisión “unilateral” cuya competencia “corresponde al Consejo Interterritorial de Salud”, que es quien decide “qué vacunas se administran, con qué criterios, en qué tramos de la población y con qué calendarios”.
Por ello, el coordinador de Podemos en Castilla y León pidió al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, al vicepresidente Francisco Igea, y a la consejera de Sanidad, Verónica Casado, que “las decisiones en un ámbito tan delicado e importante las tomen en comandita y al alimón con el conjunto de Comunidades y el Gobierno en el ámbito del Consejo Interterritorial de Salud” que, además, se celebra esta tarde.
No obstante, Fernández recordó que “no es la primera vez” que la Junta “toma decisiones unilaterales por su cuenta y riesgo” en la gestión de la pandemia, con tintes “políticos y no sanitarios” según el coordinador de Podemos en Castilla y León, aunque matizó que “cuando lo hacen, el Tribunal Supremo suele tirar por tierra sus decisiones”. Por ello, pidió “menos inseguridad jurídica y sanitaria y más medidas en común, con certidumbres y garantías para la ciudadanía”.
Plan de vacunación
Aprovechó la rueda de prensa Fernández para exigir a la Junta un plan de vacunación “claro, transparente y que se adecúe a la realidad demográfica y poblacional” de la Comunidad, con el objetivo de que “se eviten los desequilibrios que se están dando entre provincias y la enorme desigualdad entre el medio urbano y el rural”.
Y es que el coordinador de Podemos en Castilla y León denunció situaciones por las que “personas de más de 80 años tienen que hacer desplazamientos de centenares de kilómetros para administrarse la vacuna”, algo que, en su opinión, se evitaría “reabriendo consultorios y redoblando esfuerzos en el medio rural” para evitar “esos enormes desplazamientos”.
También criticó Fernández la “surrealista situación” acaecida en Salamanca, por la que se convocó la vacunación masiva en el Multiusos Sánchez Paraíso para mayores de 81 años “a través de Twitter”, cuando la mayor parte de la población de esa franja de edad “no usa Twitter y, en algunos casos, ni siquiera tienen internet en muchos de los pueblos de la provincia de Salamanca”.
“Es escandaloso y bochornoso”, sentenció el coordinador de Podemos en Castilla y León, quien pidió a la Consejería de Sanidad “conocer cuál es el plan de vacunación” así como “los criterios para vacunar al personal de la Consejería”, puesto que “se va a vacunar a todo el personal cuando la inmensa mayoría no está en primera línea ni en contacto con pacientes COVID”.
Fin del estado de alarma
Por último, Pablo Fernández se refirió al fin del estado de alarma, previsto para el 9 de mayo, señalando que “todo apunta a que la situación puede ser mejor a la que tenemos hoy”, pero matizando que habrá que “esperar a ver cómo evoluciona la situación epidemiológica” para que el Consejo Interterritorial de Salud vaya “articulando las distintas medidas”.
En cualquier caso, Fernández recordó que “ya el verano pasado se pudo solventar la situación” sin toque de queda y con desplazamientos permitidos entre Comunidades, por lo que pidió “hacer un llamamiento a la responsabilidad y la sensatez de la ciudadanía” así como “ir viendo la evolución epidemiológica de la pandemia” para “tomar nuevas medidas si es necesario”, aunque atendiendo a “criterios estrictamente sanitarios”.