El escenario que vive Arda Güler no es, ni mucho menos, el que podría haber imaginado hace unos meses. El turco se ha visto relegado a un papel muy secundario en estos últimos compromisos, pese a haber vuelto en forma tras sus problemas físicos.
La situación del otomano es compleja, fruto de una escasa participación en lo que va de curso y de la poca continuidad sobre el terreno de juego. Tan solo ha disputado tres encuentros en LaLiga, y ninguno de ellos como titular. La situación es aún peor en la Liga de Campeones, donde aún no ha debutado con el conjunto blanco, en parte, dado a sus lesiones a principio de la campaña. Solo en la Copa del Rey encontró algo de rodaje, en especial en el choque frente a la Arandina. Partió de inicio y dejó algunos destellos de la calidad que atesora.
Pese a aquella actuación, Güler no ha tenido hueco en los planes de Carlo Ancelotti. Llamativo fue lo que ocurrió en el último encuentro liguero contra el Sevilla. El ex del Fenerbahçe estuvo calentando en la banda, pero el gol de Luka Modric le dejó sin participación. Aquel tanto obligó al italiano a cambiar el plan táctico y el talentoso jugador no tenía cabida con su equipo ganando por la mínima a falta de unos minutos para el final. Lo dejó claro el transalpino en la rueda de prensa posterior al choque.
Lo cierto es que el mediapunta llegó a la capital como una de las promesas con mayor potencial en los próximos años. Sin embargo, las molestias musculares y una lesión de menisco le obligaron a parar prácticamente a su llegada a Valdebebas. Se perdió la pretemporada en Los Ángeles y en los primeros meses de competición. Un contratiempo importante para un futbolista de solo 19 años y con apenas bagaje al más alto nivel después de su exitosa experiencia en el fútbol turco.
Otro escenario
Nadie duda de su calidad y su proyección, pero este escenario no beneficia en absoluto al otomano. La cesión podría ser una solución de cara al próximo curso, en vistas de ganar mayor continuidad en la élite. Esta opción fue descartada por el propio jugador en su presentación como miembro del club blanco. Sin embargo, los últimos acontecimientos podrían hacerle cambiar de opinión.
Aún quedan por disputar los últimos meses de la temporada, en los que el Real Madrid espera mantener su ventaja como líder de LaLiga. Tampoco hay que olvidar que sigue vivo en la Champions y es uno de los máximos candidatos a levantar la 'Orejona'. Las rotaciones se antojarán necesarias para un plantel que estará sometido a una exigencia máxima. Güler podría hacerse un hueco y gozar de mayores oportunidades. Hasta el momento, solo le contemplan 92 minutos en lo que va de curso. Un bagaje muy pobre para un futbolista especial que espera darle la vuelta a la situación.