Algo que podría parecer completamente triste, como es relatar el final de la vida de una persona, se alzó con el Premio Periodismo en Positivo de la Asociación de Periodistas de Ávila, en reconocimiento a un trabajo sensible y complejo que corrió a cargo del periodista Óscar Chamorro, del grupo Vocento, con su trabajo audiovisual titulado 'Una canción para Nadka', un documental humano que relata los últimos días de un apersona aquejada de una enfermedad terminal y que también sirve para mostrar el trabajo de las unidades de cuidados paliativos.

El responsable de este trabajo recogió el galardón en el acto organizado por la Asociación de Periodistas de Ávila, y patrocinado por Nissan, donde relató que «el reconocimiento a un trabajo siempre es muy satisfactorio» y lo hace con una propuesta para la que «no fue nada sencillo conseguir el testimonio de Nadka, una persona ejemplar hasta el último momento de su vida». Del trabajo destaca la sensibilidad del jurado al «apreciar el aspecto positivo que queríamos destacar en un trabajo tan complejo» y en el «que la muerte es el telón de fondo de todo».

El presidente de la Asociación de Periodistas de Ávila, José Pulido, habló de la calidad de los trabajos presentados en una edición donde aumenta la participación, con 60 propuestas, pero donde el jurado eligió por unanimidad «un trabajo maravilloso» y que les impactó.

En el acto se contó con la presencia de Miguel Ángel Noceda, presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España, que aprovechó la oportunidad para destacar un «periodismo de verdad» que es el que «hay que hacer» ahora. Habló de momentos en los que «sufrimos más que nunca la lacra de la desinformación, los bulos y las noticias falsas que nos invaden» y que son, dijo, «fruto de la polarización política» en la que hay que pedir a los políticos que terminen con ella. 

Habló también de que la desinformación «se sirve de las redes sociales, cuya capacidad de penetración permite llegar a todas las capas de la sociedad y engañar», además de hacer que se «incumplan los principios básicos del periodismo» como son tener una información veraz, contrastada, contextualizada y «cumpliendo los códigos éticos y profesionales». Porque «si dejamos que la desinformación nos domine se acaba con la democracia», insistió.