Tras un 2023 en el que los datos de siniestralidad laboral arrojaron un ligero incremento en Ávila del 0,62 por ciento respecto al año anterior, el 2024 que acaba de concluir mantuvo esa tendencia alcista, pero con mucha más fuerza, especialmente en el sector servicios. Así se desprende de los datos aportados por la Junta de Castilla yLeón, según los cuales hasta el mes de noviembre, último analizado hasta el momento, se registraron 1.432 accidentes de trabajo, un 12,84 por ciento más que en el mismo periodo de 2023, y de ellos dos fueron mortales, mientras que otros 14 fueron graves y 1.416 leves, además de 10 casos de enfermedad profesional.
De esos 1.432 accidentes registrados en la provincia de enero a noviembre, 1.294 se produjeron durante la jornada laboral y de ellos 1.280 fueron leves, 12 graves y dos mortales, mientras que los 138 restantes fueron in itinere, es decir, en el trayecto de casa al trabajo, 136 de ellos leves y dos graves.
El sector que, una vez más, mantuvo los niveles de siniestralidad laboral más elevados en esos once meses y que está detrás de ese fuerte incremento de la siniestralidad laboral en Ávila, fue el de servicios, con 796 accidentes, mientras que otros 200 se produjeron en la construcción, 185 en la industria y 113 en el sector agrario. Y hubo una subida muy significativa en los servicios, del 16,37 por ciento (112 accidentes más que un año atrás), mientras que el otro repunte se produjo en la construcción, del 8,11 por ciento (15 más) y en los otros dos sectores las cifras fueron menores que en 2023. Así, en la industria se produjo un descenso del 1,07 por ciento (dos menos) y en el sector agrario la caída fue del 16,3 por ciento (22 menos).
En cuanto a su gravedad, como indicábamos, en esos once meses se contabilizaron dos accidentes mortales en la industria y la construcción, uno menos que en 2023, además de 14 graves, cinco de ellos en el sector servicios, dos en la industria, cuatro en la construcción, uno en el agrario y dos in itinere, y de los 1.416 leves, 791 fueron en el sector servicios, 195 en la construcción, 182 en la industria, 112 en el agrario y otros 136 in itinere.
Pero además de los ya apuntados 1.432 accidentes laborales con baja, en la provincia de Ávila también se registraron de enero a noviembre otros 1.511 que no requirieron baja, por lo que el número total de accidentes contabilizados en ese periodo alcanzó los 2.943, lo que supuso un aumento del 16,05 por ciento (407 más) respecto a ese periodo de 2023 cuando se registraron 2.536.
Por actividad. Dentro del sector servicios, fueron los relativos a la asistencia residencial, con 100;las actividades dentro de la Administración Pública y Defensa, con 92;el comercio al por menor, con 81; los servicios de comidas y bebidas, con 78, y las actividades sanitarias, con 73, los que mayor número de siniestros contabilizaron en esos once meses en Ávila, mientras que en el transporte terrestre se contabilizaron 58, en el comercio al por mayor, 45; en los servicios de edificios y jardinería, 42; en los servicios sociales, 41, y en los servicios de alojamiento, 34. Los cinco accidentes graves se registraron en la venta y reparación de vehículos, el transporte terrestre, el servicio de edificios y jardinería, las actividades sanitarias y las actividades deportivas y de entretenimiento.
En la construcción, por su parte, 108 se produjeron en la construcción de edificios, otros 73 en la construcción especializada y 19 en ingeniería civil, uno de ellos mortal, mientras que en la industria, la mayoría, 69 en concreto, se concentraron en la industria de alimentación, si bien hubo otros 16 en la maderera, 15 en la fabricación de productos metálicos y 14 tanto en la fabricación de vehículos a motor como en la recogida y tratamiento de residuos, con uno de ellos mortal en la industria alimentaria.
Por su parte, en el sector agrario, de los 113 accidentes registrados, 76 se produjeron en la agricultura, ganadería y caza, y los 37 restantes en la silvicultura y la explotación forestal, con un grave y el resto leves.