Alerta en la UME por los incendios provocados en Ávila

B.M / EFE
-

En una visita de la ministra de Defensa, Margarita Robles, a las instalaciones de Torrejón de Ardoz se puso de manifiesto que el entorno de la Sierra de Gredos es objeto de especial atención

Alerta en la UME por los incendios provocados en Ávila - Foto: Ruben Somonte

Ávila levanta la alerta por parte de la Unidad Militar de Emergencias (UME) ante los muchos incendios «provocados» que se están produciendo y de los que ha alertado la comunidad autónoma. Además la provincia abulense forma parte de la zona de mayor probabilidad de intervención de esta unidad, que se desplaza a lugares comprendidos desde el arco mediterráneo a zonas de interior y del noreste peninsular (Orense, Zamora y Ávila). A ello se une que el entorno de la Sierra de Gredos es objeto de especial atención, así como Canarias y Galicia, donde se han activado las operaciones 'Centinela gallego' y 'Centinela tinerfeño', de vigilancia y disuasión para la prevención de incendios.

Estos fueron algunos de los datos que se expusieron durante la visita de la ministra de Defensa, Margarita Robles, a las instalaciones de la UME en Torrejón de Ardoz y donde se dio a conocer la información de actualización de la Campaña de Lucha contra Incendios Forestales. Allí, la propia ministra explicó que la situación «de este verano no está siendo tan gravosa como la de otros años» aunque también recordó que las intervenciones de la UME tienen «muchísimo trabajo detrás». Ahora mismo la unidad tiene a disposición del Estado a 1.400 militares en ataque directo al fuego y 1.500 en funciones de apoyo logístico.

La Unidad Militar de Emergencias ha intervenido en siete incendios forestales durante la actual campaña de lucha, en la que el número de fuegos y la superficie quemada están por debajo de la media de la década, mientras que la previsión es que la situación continúe siendo moderada.

La UME ha desplegado hasta 880 militares y 274 vehículos en las siete intervenciones que ha realizado. Tres han sido en incendios forestales en campos de maniobras, los de Chinchilla (Albacete), Los Alijares (Toledo), y Cerro Muriano (Córdoba), con operaciones con 241, 19 y 119 militares, respectivamente.

También ha intervenido en cuatro incendios forestales a solicitud de tres comunidades autónomas. La unidad respondió con 120 militares y 40 vehículos al fuego ocurrido en Valverdejo (Cuenca), del 30 de julio al 1 de agosto; 133 militares acudieron además a extinguir el incendio de Benasau (Alicante), que ocurrió en el mismo periodo.

Además, la UME se desplegó en Toledo para responder al incendio forestal de La Estrella con 129 militares y 40 vehículos del 6 al 7 de agosto, y en la comunidad autónoma de Aragón se desplegaron 119 militares con 36 vehículos para extinguir el fuego de Corbalán (Teruel), del 11 al 13 de agosto.

En el exterior, la UME ha participado en dos despliegues en Bulgaria por el 43 Grupo de Fuerzas Aéreas del Ejército del Aire y del Espacio, como equipo de enlace y asesoramiento en las operaciones derivadas del Proyecto RescEU.

Los jefes de los batallones de intervención y los subgrupos tácticos detallaron a Robles los dispositivos y coincidieron al señalar la sintonía y el trabajo en común con las comunidades autónomas, reconociendo que algunas, como Aragón, han recurrido a activaciones rápidas.

La UME explicó que la mayor humedad del combustible vegetal ha permitido reducir el número de incendios y su virulencia porque los vividos han sido de viento, y no convectivos, incendios de sexta generación que tienen muchos frentes, que dificultan la extinción.

Sobre esta campaña, los militares de la UME destacan además que se estén produciendo muchos incendios provocados en Ávila, de los que ha alertado la comunidad autónoma, o la detención de tres pirómanos en Canarias, donde se han producido también menos incendios de lo esperado.

En todo caso, las previsiones meteorológicas de la Agencia Estatal de Meteorología y del Centro Europeo de Predicción Meteorológica consideran probable que los próximos meses sean más cálidos y secos de lo normal, tanto en España como en todo el entorno mediterráneo. Es por ello que se mantendrá un seguimiento constante de las condiciones meteorológicas y el comportamiento de los incendios, para así poder optimizar la respuesta de la unidad.

La presente campaña de lucha contra incendios forestales se inició el pasado 1 de junio, quince días antes de lo que venía siendo habitual, y se extenderá hasta el 30 de septiembre, aunque está previsto mantener la vigilancia hasta quince días después, contando con que las temperaturas se mantengan altas hasta esa fecha.