Los vecinos de San Bartolomé de Pinares tendrán que seguir abasteciéndose de agua embotellada después de que los segundos análisis del agua de abastecimiento volvieran a declararla como no apta para el consumo. Según adelanta la alcaldesa de la localidad, aunque todavía no hay informe oficial, el laboratorio contactó con el Ayuntamiento para indicar que el resultado del segundo análisis aún no permite el consumo de agua por los vecinos. De los tres parámetros que tenían elevados, el de aluminio se ha conseguido bajar a la mitad y, aunque sigue alto, no sería suficiente para declarar el agua no apta. El problema llega con el de trihalometanos, que sigue igual y es lo que lleva a prohibir el consumo de agua mientras que para el tercero hay que esperar para conocer el resultado aunque en principio por sí mismo no sería para no poder consumir.

Ante esta situación, por el momento los vecinos seguirán recibiendo agua embotellada a través de la Diputación y ayer mismo se hizo entrega del agua correspondiente a esta semana a más de 400 personas.

En cuanto a los pasos que habrá que seguir desde ahora, la alcaldesa asegura que hablará con Sanidad para ver «la manera de bajar los trihalometanos», por lo que de momento no sabe qué actuaciones tendrán que llevar a cabo. En todo caso, hasta que no se tome una decisión y se actúe no se contactará con el laboratorio para poder hacer una nueva prueba.

Fue la semana pasada cuando se conoció que el resultado de un primer análisis del agua de consumo en San Bartolomé de Pinares indicaba que no era apta al tener tres parámetros elevados. Ante esta situación el Ayuntamiento emitió un bando para prohibir el consumo de agua (beber y cocinar) y se contactó con la Diputación para proceder al reparto de agua embotellada con una entrega de dos litros por persona y día. Esto se hacía a la espera de un segundo análisis de confirmación que se realizó a finales de semana y del que este martes se conocieron los resultados. Al seguir siendo no apta para el consumo el agua se mantiene el reparto de agua embotellada hasta que se logre solucionar la situación.

Una vez conocida la situación, la Diputación se pone «a disposición del Ayuntamiento de San Bartolomé de Pinares para contribuir a la mejor, más completa y rápida solución al problema detectado en la red de abastecimiento de agua del municipio», señala el vicepresidente primero y diputado de Desarrollo rural, Jesús Martín. Dada la situación, el vicepresidente primero anuncia el envío de un nuevo convoy de agua embotellada al municipio «a finales de esta semana», dado que el pasado viernes se hicieron llegar 24.000 litros, a razón de dos por vecino y día, para garantizar el agua para beber y cocinar, puesto que el agua de la red sí es apta para lavar y otras tareas domésticas. Martín agradece «la comprensión de los vecinos ante esta situación» y reitera «el compromiso de la Diputación para colaborar en el análisis de alternativas con los expertos correspondientes y la ejecución de la solución más adecuada para este problema».