El deporte de Ávila necesita una «planificación clara, una correcta gestión del presupuesto» ante las deficiencias que presentan actualmente las instalaciones de la ciudad. Es la petición «y la mano tendida» que David Gil, concejal del Partido Popular, lanzaba al Equipo de Gobierno de Por Ávila ante el estado y los problemas existentes en las diferentes instalaciones deportivas de la ciudad.
Con el Adolfo Suárez de fondo y la 'famosa' torreta de la luz levantada este pasado lunes después de toda una temporada en el suelo por culpa de un golpe de viento que obligó a retirarla, David Gil, concejal del Grupo Municipal delPartido Popular, quiso «poner sobre la mesa» la «grave problemática de la ciudad de Ávila en materia deportiva». De nuevo ponía en evidencia «el estado de abandono de las diferentes instalaciones deportivas de la ciudad» como Sancti Spíritu, SanAntonio, las pistas de atletismo y su graderío. Iba más allá en esta ocasión David Gil, que lamentaba la falta de suficientes «instalaciones deportivas» así como la ausencia de una correcta «planificación y gestión del presupuesto por parte del Equipo de Gobierno de Por Ávila», que a su juicio está actuando «sin un criterio claro, sin priorizar las necesidades y demandas ante las carencias de la ciudad» en matera de deportes. De ahí que se esté produciendo una forma de actuar a base de «reformas menores, que aún siendo necesarias, no son prioritarias ante la grave situación en la que se encuentra la ciudad en materia deportiva».
Aprovechando la visita al Adolfo Suárez, quiso David Gil recordar cómo se han gestionado algunas de las últimas actuaciones en el estadio.Habló de la torreta de luz. «En la Comisión de Deportes de ese mismo mes –se cayó a finales de octubre de 2023– se informó que se procedería a la restauración de la torreta en unos pocos días o semanas. Pasó toda una temporada, el verano y hasta este lunes no se ha levantado. Han pasado diez meses» recordaba a este respecto David Gil. En similar sentido se pronunció sobre el cambio de iluminación obligado por la normativa de la RFEF tras el ascenso del Real Ávila a la Segunda Federación. «No ha sido hasta el 21 de agosto cuando se ha cerrado el plazo para que las diferentes empresas se pudieran presentar al cambio de las luminarias. Dos meses y medio después de saber que el cambio era necesario y a pocos días de comenzar la competición. Todo deprisa, todo corriendo». Una inversión de 180.000 euros que «al no estar presupuestado, deberá salir de otras partidas presupuestarias de Deportes» y que conllevará a «prescindir del cambio del césped artificial en SanctiSpíritu que tanta falta hace».Quiso en este sentido aclarar David Gil que «no ponemos en tela de juicio las actuaciones, sino la falta de gestión y planificación presupuestaria que conlleva al final situaciones de abandono de unas instalaciones deportivas para poder cubrir otras».
Considera David Gil que «no se puede actuar de manera cortoplacista» como se estaría haciendo sino que se requiere una forma de actuación a largo plazo que permita «la subsanación y creación de nuevas instalaciones».