La Junta de Castilla y León prevé abonar en los próximos dos meses, antes de que acabe el año, las ayudas directas para los ganaderos afectados por la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE). Mañana se presenta esta línea, financiada con fondos propios de la Comunidad, en una comparecencia prevista a las 10.20 horas, según avanzó hoy el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas.
Dueñas, que clausuró la jornada 'Jóvenes y familia agraria. Diversificación de la economía en el medio rural', celebrada en el Parador de Segovia, insistió en que estas ayudas seguirá la fórmula de las aprobadas ante los efectos de la guerra de Ucrania, de tal forma que en el momento en el que automáticamente den el visto bueno a la subvención, se la ingresarán de manera directa "sin hacer absolutamente nada más".
De esta forma, Gerardo Dueñas confió en que en los próximos dos meses, antes de finalizar el año, el sector tendrá "el dinero en su casa". Además, aprovechó para reclamar al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que complemente con sus recursos esta línea de la Comunidad para hacer frente a una situación que consideró "muy grave", "independientemente que parezca que se olvida de ellos y no considera la gravedad del tema".
En ese sentido, el titular de Agricultura reiteró la crítica al Ministerio por su "falta de acción" en este tema y recordó que el ministro en funciones Luis Planas no les ha contestado a una carta. Además, indicó que están avanzando en una serie de estudios que "lógicamente" consideró que debían haber complementado con el Gobierno que aseguró es el competente. Más aún, dijo, cuando el pasado año se registraron casos en Andalucía, por lo que manifestó que debería haber existido un protocolo nacional para haber "controlado" la enfermedad de otra manera.
"Nos hemos reunido con alguna empresa de vacunación, seguimos desarrollando temas de apoyo y de ayudas, estamos haciendo controles continuos con las diferentes especies de ganado pero de alguna forma la administración autonómica en sí tiene pocas posibilidades ya que realmente el paraguas nacional es el que nos tiene que marcar una estrategia conjunta a todos", dijo Gerardo Dueñas, quien confió en que el clima de este otoño e invierno acabe con el culicóide, es decir, que muera el mosquito y por tanto no vuelva a aparecer la enfermedad hasta avanzada la primavera, como ocurre con la lengua azul, ya que prácticamente -explicó- la transmisión es "muy similar".