El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Ávila denunció este viernes que la piscina cubierta de la zona sur, abierta al público este 2 de noviembre, «nace con carencias» estructurales, de servicios y de personal. Su portavoz, Eva Arias, explicó que esta nueva instalación deportiva «arranca con una demora de casi cinco años», pero con carencias como la ausencia de salida de humos en la cafetería, «que condicionará el pliego para su explotación y por tanto los ingresos municipales por ese servicio»; con unas dimensiones de sus vasos que únicamente permiten la celebración de competiciones de carácter regional, y con un problema de «falta de personal».

Sobre ese último punto comentó Arias que «hace dos Junta de Gobierno, el equipo de gobierno tuvo que retirar del orden del día un macrocontrato para cubrir el personal de todas las instalaciones deportivas de la ciudad (taquillería, celaduría, socorristas...) porque venía supeditado al incremento que creían que iban a recaudar con la aprobación de las ordenanzas municipales. Como no se llevó a efecto, la interventora les dijo que ese punto tenía que ser suprimido porque no se podría llevar a efecto al no haber partida presupuestaria para abordarlo».

Así las cosas, en el PSOE suponen que los servicios de la nueva piscina se están prestando con la prórroga del contrato transitorio que existía para abordar la prestación de servicios en diferentes instalaciones municipales, y todo por «una falta de previsión, pues se sabía desde hace cuatro años que era un servicio que habría que prestar», afirmó Arias, quien se mostró totalmente contraria a la externalización de esos servicios.

También señaló la portavoz del Grupo Socialista que debido a la demora en las obras, «se han gastado en la formalización de contratos un millón de euros por año de retraso, alcanzando finalmente un presupuesto de 5 millones», al tiempo que recordó que la anterior piscina cubierta «se tuvo que derruir por falta de mantenimiento cuando gobernaba el PP».

Yes que, según comentó el también concejal socialista Fernando Contreras, «la gestión de la derecha es hacer infraestructuras solo para ganar elecciones y olvidarse después de su mantenimiento».

Respecto al proyecto de la piscina, Contreras habló de «carencias que lastrarán el futuro» como la cafetería sin salida de humos, igual que en la de la zona norte, que limita la oferta y que pone de manifiesto que Por Ávila no sabe gestionar y no tiene una idea de ciudad».

«No podemos permitir que esta piscina sea un proyecto minúsculo y carente de visión de futuro que se abre con casi cinco años de demora y con un sobrecoste para las arcas públicas de casi dos millones de euros», subrayó el concejal del PSOE, quien denunció además la «opacidad» del gobierno municipal respecto a esta infraestructura, pues «en octubre se solicitó por toda la oposición ver las obras antes de su apertura y, pese a que nos dijeron que sí, no se hizo». «Deben entender que la oposición es un órgano de control de gestión y que el equipo de gobierno es quien gestiona», remarcó.