Cerrar negocios con un recio apretón de manos

M.M.G.
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Muñana vuelve a abrir sus puertas a los asistentes a la XXXVI Feria de Maquinaria Agrícola y Automoción, la XXII Feria Agroalimentaria y la V Feria de Ganado, que reúne este fin de semana a cerca de 40 expositores

Cerrar negocios con un recio apretón de manos

En pleno siglo XXI, en un tiempo marcado por los negocios en la red y las conversaciones a través de pantalla, la celebración de ferias como las que este fin de semana se viven en Muñana evidencia la importancia que sigue teniendo cerrar negocios a la antigua usanza: con un recio apretón de manos mientras, por qué no, se bebe un chato de vino.

La XXXVI Feria de Maquinaria Agrícola y Automoción, la XXII Feria Agroalimentaria y la V Feria de Ganado de esta localidad del Valle Amblés se inauguraba este sábado de manera oficial para continuar defendiendo y apoyando el mundo del campo en general, y del abulense en particular.

Tres ferias en una en la que cerca de cuarenta expositores muestran al público sus productos, creando un ambiente festivo del que este sábado ya disfrutaron cientos de personas pese a la amenaza de lluvia y que seguirán haciéndolo también el domingo.

«Esta feria es un apoyo a los ganaderos, al mundo del campo, que está tan deteriorado.Es algo muy importante», decía a los medios el anfitrión principal de la cita y alcalde de la localidad, Miguel Ángel Jiménez, que reconocía el bajón pegado este año por la  Feria de Maquinaria Agrícola y Automoción, con menor número de expositores y máquinas que otros años.

Al mismo quisieron acompañarle representantes de la Diputación Provincial y de la Junta de Castilla y León.En el primero de los casos era Jesús Martín, vicepresidente primero y responsable del área de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, el encargado de reflexionar sobre una feria que describió como «un referente» no sólo de la comarca, sino también a nivel provincial e, incluso, nacional.

«Aquí de lo que hablamos es de lo que somos: de campo, de ganadería, de producción agroalimentaria, los tres pilares fundamentales en la economía de nuestros pueblos», reflexionaba Martín, que agradecía también al Ayuntamiento de Muñana «el trabajo inmenso» que hay detrás de la cita.

«Es obligatorio que la Diputación apoye estos eventos», reconocía Martín, que hablaba de la importante presencia de la entidad provincial en la feria, con un expositor de Ávila Auténtica y con cabezas de negra avileña de su ganadería. 

Por parte de la Junta de Castilla y León era el delegado territorial, José Francisco Hernández Herrero, el encargado de valorar «una feria referencial» en la provincia. «Tenemos que hacer lo posible desde las administraciones, pero también quiero hacer un llamamiento a toda la población abulense para mantenerla y potenciarla», apelaba al trabajo de todos Hernández Herrero. «No podemos remitirnos exclusivamente al comercio electrónico para tener referencia de todo lo que aquí se ofrece, que es bueno y variado», reflexionaba el delegado, para el que «el contacto con las personas es siempre enriquecedor. Potenciamos el territorio y a nuestros productores y empresas» y que respecto a ese bajón al que hacía referencia el alcalde se mostraba convencido de que llegará el momento de «reverderdecer laureles».

Y en representación de Agromán y Caixa Bank Castilla y León estaba Jesús López Jiménez, que defendía la «importancia vital» del mundo rural.

Todos ellos pudieron pasear por las tres ferias de Muñana, comenzando por la de Maquinaria Agrícola yAutomoción, con expositores relacionados con todos los aspectos necesarios en una explotación, desde la ropa de trabajo a los suministros industriales, pasando por los contenedores o la energía.

La feria de ganado la daban vida este sábado unas 40 cabezas de ejemplares de avileña, limusín, blonda y charolés.

Y a sólo unos pasos de allí, el polideportivo de Muñana acogía la Feria Agroalimentaria, con expositores llegados de distintos puntos de España (algunos de ellos ya repetidores en este encuentro) y que ofrecieron a los visitantes deliciosos productos como mieles, embutidos y quesos, encurtidos, anchoas llegadas del Cantábrico o sobaos pasiegos, así como productos de artesanía.