El presidente del Partido Popular de Ávila, Carlos García, valora que el Gobierno de España haya aprobado en el último Consejo de Ministros una línea de ayudas destinadas a sufragar el 50% del coste de las obras de reparación de las infraestructuras dañadas por el paso de la borrasca Juan, que a finales del pasado mes de enero afectó a muchas zonas de la provincia, especialmente de la comarca de La Moraña.
De esta manera, Carlos García recuerda que este acuerdo del Consejo de Ministros llega «después de la reivindicación insistente hecha por los alcaldes, por la Diputación Provincial y por el PP de Ávila». Además, el presidente del PP de Ávila también añade que aunque es «cierto» que se aprueba «apenas dos meses después de los destrozos de aquel temporal», precisa que estarán «vigilantes para que sean ágiles y que este anuncio no se quede en más propaganda gubernamental».
Por otro lado, el presidente del PP de Ávila vuelve a poner el foco en la financiación de las entidades locales, que cataloga de «insuficiente» cuando «son las administraciones que más cerca están del ciudadano y mejor conocen sus necesidades». Asimismo, lamenta que «se sigan dando este tipo de ayudas que sufragan solo la mitad de unas obras que muchas veces superan la capacidad económica de pequeños consistorios rurales que se ven abocados al endeudamiento, a la renuncia o a la elección entre proyectos para poder devolver a su estado anterior infraestructuras que necesitan».
En este sentido, Carlos García considera que es «la infrafinanciación a la que el Gobierno nos tiene acostumbrados y que esperamos que se revierta», al tiempo que compromete, como presidente de la Diputación de Ávila, «el auxilio a esos municipios, dentro de nuestras posibilidades, que son las que son, puesto que también estamos dentro de las entidades locales a las que maltrata el Ejecutivo».
Para concluir, el presidente del PP de Ávila reitera la necesidad de que las confederaciones hidrográficas «abandonen su papel burócrata y sancionador y se impliquen en la limpieza de los cauces de ríos y arroyos, que es lo mejor que podrían hacer para evitar, o al menos disminuir, los efectos de trombas de agua como los que dejó la borrasca Juan en enero».