La Junta de Castilla y León prepara un plan especial para recuperar tanto medioambientalmente como socioeconómicamente el oeste de la provincia de Zamora afectada por el brutal incendio de la Sierra de la Culebra. Unas llamas que tras dos jornadas totalmente fuera de control, ayer vivieron una jornada positiva tras el cambio en las condiciones meteorológicas que permitió a los setecientos profesionales que trabajaban sobre el terreno perimetrar el incendio y ahora se centran en estabilizarlo para evitar el grave peligro que hay de reproducciones ante la posible vuelta de fuertes vientos y condiciones adversas. Para ello, los operativos trabajan en enfriar las zonas controladas y evitar que se reaviven los focos, después de que el frente del fuego se quedara sin llama después del brusco cambio térmico experimentando en la madrugada del sábado al domingo.
Hasta el momento, y a falta de que los expertos determinen de forma precisa la cifra total, se estima que han ardido entre 25.000 y 30.000 hectáreas de terreno en el oeste zamorano, lo que sitúa al fuego de la Sierra de la Culebra como el peor de la historia de Castilla y León –superando las 22.000 del incendio de Navalacruz (Ávila) del pasado verano–, y podría también llegar a ostentar este triste récord a nivel nacional –las 30.000 de Cortes del Pallás (Valencia) de hace una década–.
«Aproximadamente a las seis de la mañana, el perímetro del incendio ha quedado estabilizado y ha continuado así a lo largo de la mañana. Ha habido alguna reproducción, siempre en el interior del perímetro, y lo que estamos ahora es esperando estas horas críticas, que empiezan ahora, en torno a las dos de la tarde, hasta las seis o siete de la tarde», explicó el director general de Patrimonio Natural y Política Forestal , José Ángel Arranz.
Virginia Barcones y Alfonso Fernández Mañueco (c), entre otros, ayer en Zamora. - Foto: JL Leal ICALUnas palabras que presenció junto al presidente de la Junta,AlfonsoFernández Mañueco; la delegada delGobierno,Virginia Barcones; y el consejero de Vivienda y MedioAmbiente, JuanCarlos Suárez-Quiñones, que estuvieron en el puesto de mando avanzado de Sarracín de Aliste para conocer el estado de un incendio que durante días ha tenido en vilo a la Comunidad, obligado a desalojar una veintena de localidades, aunque a primera hora de ayer volvieron a sus casas, mientras que la N-631 y el AVE volvieron a estar operativos.
Escuchar y atender
Desde allí, Fernández Mañueco aseguró que el Ejecutivo autonómico trabaja ya en ese plan especial que acometerá «de la mano del Gobierno de España y escuchando y atendiendo a los vecinos». Para ello se comprometió a escuchar las necesidades y las pérdidas que han tenido los afectados y atenderlas teniendo como cauce de intermediación a los ayuntamientos, que serán los encargados de recoger las peticiones.
El presidente de la Comunidad sostuvo que van a responder «desde todas las administraciones y desde todos los rincones» como lo han hecho en otros momentos en situaciones parecidas. «Si respondimos en el pasado, también vamos a responder en estos momentos», ratificó Fernández Mañueco, que agradeció y reconoció a quienes «con mucho civismo» han soportado la situación y han obedecido las recomendaciones de las autoridades, tras lo que se comprometió a resolver los problemas que han generado las dificultades derivadas del incendio. Igualmente, quiso agradecer la colaboración del Gobierno de España y de todas las Comunidades que han aportado medios a las tareas de extinción porque «se han volcado» y han demostrado que la España de las autonomías «funciona».
Técnicos del Ministerio
«Ayer hablé con el presidente del Gobierno de España y estuvimos valorando la situación y quiero agradecer sus palabras y la disposición desde el primer minuto de todas las opciones que había y que reclamaban los directores», indicó Fernández Mañueco. Precisamente ayer se conoció también que el Ministerio para la Transición Ecológica enviará hoy personal técnico a diferentes zonas de la Sierra de la Culebra para hacer una primera estimación de los daños causados por el fuego. El objetivo de estos equipos técnicos será empezar a valorar los daños producidos por el fuego sobre bienes particulares y comunales para poder establecer ayudas a las personas y a las entidades afectadas por la quema de sus bienes.
«El Gobierno de España ha aportado de manera inmediata todos los medios requeridos por la Junta», destacó la propia Virginia Barcones, que quiso mostrar su «agradecimiento» con «a todos los que se han estado jugando la vida».