El Herradón de Pinares vivió este domingo una emotiva jornada en recuerdo de los hechos ocurridos el 1 de septiembre de 1999, en el que una tormenta provocó la crecida de varios ríos, entre ellos el Gaznata, que atraviesa por medio la localidad, llevándose todo lo que encontró a su paso, diviendo el pueblo en dos, y arrasando ganado, muros, casas, puentes e inundando las casas aledañas al río. Por fortuna no hubo que lamentar víctimas humanas y hoy, desde el Ayuntamiento de El Herradón de Pinares, se quiso agradecer a las personas que vivieron aquellos duros momentos (muchos que aún hoy viven y los que nos han ido dejando con el paso de los años) la fuerza que han tenido para seguir adelante, «de mirar al presente y seguir hacia al futuro de vida de este pueblo», como reconocía el alcalde de la localidad, Miguel Ángel Pozo Martín.
Así, este domingo, después de la misa, se procedió a la inauguración de una placa conmemorativa que lucirá en la fachada del Ayuntamiento y de una exposición fotográfica sobre la riada, en un acto que contó, además de con la presencia de la Corporación municipal, encabezada por su alcalde, con el subdelegado del Gobierno, Fernando Galeano, el jefe del Servicio Territorial de Cultura, Alejandro Núñez, y el diputado de Cultura, Javier González, así como alcaldes de la comarca.
En su intervención, el alcalde recordó que esa plaza donde se celebró el acto, que tuvo que ser remodelada en su día, «aún conserva sus huellas y sus recuerdos de aquel terrible, angustioso y fatídico día». «Ese día –añadió– en el que se nos fue arrebada la esencia de nuestro pueblo. Ese día en el que nos arrebató parte del encanto y de la forma singular de vivir en El Herradón».
El Herradón conmemora los 25 años de su riadaMiguel Ángel Pozo afirmó que «el día 1 de septiembre es una fecha que siempre estará marcada en nuestro calendario. Son muchos los recuerdos, las historias vividas y contadas por nuestros familiares, amigos y vecinos de esa noche. Historias personales de auténtica supervivencia vividas en primera persona;y lo mejor, lo bueno de todas esas historias, es que lo han podido contar ellos mismos».
Personas que, según reconoció, aún hoy en día, cuando atruena, «reviven esos miedos y miran con preocupación este cauce del río Gaznata con la esperanza de no oír «viene el río grande», como aquella fatídica madrugada».
Por eso, con esta acto celebrado este domingo se quiso agradecer a esas personas por seguir adelante, como a las instituciones, entidades y personal voluntario que contribuyeron a los largo de estos 25 años a la recuperación de El Herradón.