Llegó el día. Ávila vuelve a jugar con las agujas que marcan el tiempo y regresa a un momento de su pasado, el Medieval, con el programa de las XXVII Jornadas Medievales y el mercado como centro y con el mejor acompañamiento, el que ofrece la propia ciudad. Esta cita, marcada probablemente como la más importante para el turismo en el año siempre llega acompañada de una buena respuesta de asistencia de abulenses y visitantes. Y por eso, hay una estimación de afluencia de más de 100.000 personas por el propio Ayuntamiento, pero como dijo la teniente de alcalde de Empleo, Industria, Comercio, Turismo y Cultura del Consistorio abulense, Sonsoles Prieto, se presenta con el reto algo más ambicioso, el de igualar o superar los 120.000 visitantes. «Esperamos tener una edición completa con sus tres días. Recordamos que hace dos ediciones rozábamos los 120.000 visitantes y esperamos que en esta edición podamos alcanzarlos o superarlos. Por tanto, animamos a la gente a que venga a Ávila, que es el destino para este fin de semana», señalaba la representante municipal. 

Las XXVII Jornadas Medievales de Ávila–El mercado de las tres culturales, declaradas de Interés Turístico Nacional y organizadas por el Ayuntamiento de Ávila, comenzaron este viernes con una intensa agenda de tres días que incluirá una programación con cerca de 120 actividades.

La teniente de alcalde de alcalde  y el concejal de Turismo, Deportes y Fiestas, Carlos López, dieron la bienvenida en los diferentes espacios a los más de 200 artesanos que se distribuyen en ocho espacios del recinto mercado que cuentan con puestos. De ellos, cerca de medio centenar, de la provincia de Ávila, están localizados en las plazas Adolfo Suárez y Corral de Campanas, así como en la calle San Segundo.

Comienza un Medieval que quiere superar los 120.000 visitantes - Foto: Isabel GarcíaPrieto habló de las especiales «ganas» que hay este año de vivir estas jornadas medievales porque «nos debían un día de la edición anterior». Un 'debe' que se quiere cobrar el Ayuntamiento y los asistentes en un mercado «plagado de actividades, más de 120 estáticas se van a llevar a cabo» y a lo que se unen «todos los pasacalles que van a dinamizar el gran escenario que es nuestra ciudad con todas sus calles y plazas y la compañía de esos más de 200 productores que tienen sus puestos distribuidos por las distintas plazas y calles de nuestra ciudad». Todo esto junto a los «acompañamientos que tenemos» que llegan con  las compañías de animación que «van a ser las encargadas de que las calles estén repletas de actividad durante estos tres días que tenemos por delante». 

Las marionetas gigantes articuladas de Omolùnkà, junto diferentes grupos de animación, en la calle San Segundo; los títeres de El sueño de volar y la armonía en el aire de Eliyah Hera, en el Mercado Grande, junto con una exhibición de cetrería en el atrio de San Isidro y cuentacuentos infantil en el jardín de San Vicente fueron las primeras actividades que se pudieron ver en la mañana del viernes en el recinto del mercado, que tenía programado sólo en esta primera jornada una treintena de actividades y espectáculos.

A lo largo de la cita se podrá ver la presencia de compañías nacionales e internacionales que estos días desplegarán su actividad en el transcurso de unas jornadas medievales que estrenan el Mercado Grande como punto escénico principal, con una treintena de actividades hasta el domingo.

Con esa estimación de afluencia de más de más de 100.000 visitantes, en función del público asistente en ediciones pasadas, se estimaba que la mayor presencia de visitantes al mercado se realizara en las tardes del viernes y el sábado, cuando también se desarrollarán los grandes espectáculos de fuego y bestiario.

En este sentido, Sonsoles Prieto subrayó la presencia continuada en el mercado de efectivos de Policía Local y Nacional, Guardia Civil, Bomberos y Protección Civil, así como de los servicios municipales dentro de un operativo de seguridad con 400 efectivos.