El Real Ávila vuelve a ser líder del Grupo VIII de Tercera.Lo hace 2.177 días después de la última vez. Casi seis años –5 años, 11 meses y 14 días para ser exactos– han pasado desde la última vez que el equipo encarnado oteara el horizonte del Grupo VIII desde los más alto. Demasiado tiempo. Como en esta ocasión, fue con el comienzo de la temporada 2017-18.El equipo dirigido entonces por César Jiménez y formado por jugadores como Llorián, Iván Vila, Rubén Ramiro, Javi de Mesa, Isma, Julen Itaxo, Edu, Oli, Raúl Arroyo o Domenech se imponían a finales de octubre –jornada 10ª– al Salmantino en el Helmático para situarse en lo más alto de la clasificación. Todo aquello se acabaría desmoronando. César Jiménez sería cesado –tomaría el relevo Miguel Ángel Miñambres– y el equipo acabaría la temporada décimo. Un buen ejemplo de que, en ocasiones, no todo lo que bien empieza, bien acaba. Puede dar buena fe de ello Andrés Llorián, hoy capitán de los encarnados y un jugador que ha vivido las últimas tres ocasiones en las que el Real Ávila ha sido líder. Lo hace en la actualidad, lo hizo en la 2017-18 y lo vivió en la 2013-14.
El actual capitán del equipo formaba parte de aquella plantilla de la temporada 2013-14 dirigida inicialmente por Francisco Antonio Sánchez 'Kiko' y que cerró la temporada en manos de Borja Jiménez, jugando los playoffs ante el Mérida y sumido en un Concurso de Acreedores que casi se lleva por delante al club. Aquel equipo, con jugadores como José Antonio Camacho 'Pito', Iván Cabezudo, Rui, Barrera, Piru, Emilio, Trujillo, Cueto, Villa, Quirós, Jean Claude, Pindado, David González, José María, Josito, Javi, Cabrera, Vicente o Llorián se convertía en el líder del Grupo VIII de Tercera en la jornada 3ª. Cuatro jornadas después –7ª– el equipo caía a la quinta plaza y 'Kiko' era cesado de forma fulminante.
No siempre ocupar el liderato significó un mal final.Lo disfrutó José 'Chino' Zapatera en la 2006-07, su primer año como entrenador encarnado.Una temporada en la que, como en las que vendrían después, acabaría jugando los playoffs.
Ahora son los de Miguel de la Fuente los que disfrutan de su condición de líderes y lo hacen con plena conciencia de lo que viene por delante. «Vernos primeros e ir en esa condición al Helmántico, sabiendo que si se dan bien las cosas pones un margen y si no se dan bien sigues a una distancia de un partido, era un poco el objetivo que perseguíamos, meter presión y decir aquí estamos nosotros, en un proceso de formación pero en el que nos están saliendo las cosas» explicaba Miguel de la Fuente, entrenador del Real Ávila. Valora el liderato el equipo encarnado por cómo llega, «iniciando la temporada perdiendo en Becerril», ganando después cuatro jornadas consecutivas y sin recibir un gol.