La procesión de La Estrella dejó imágenes de otros años, como las de la iglesia de Las Gordillas rodeada de público expectante para ver la dura salida. Pero también novedades, en este caso con la concesión del tercer grado a dos internas del Centro Penitenciario de Brieva, que acompañaron en la procesión. Además, la previsión del tiempo hizo que finalmente tuvieran que refugiarse en la Catedral tras dos horas de recorrido.
Ya desde las 14,00 horas había gente esperando en el exterior del templo, aunque faltaban dos horas más para que llegara el momento de la salida. En el interior se bullía de actividad y antes de salir los costaleros se iban preparando, con las protecciones y los estiramientos, un grupo de niños miraban las golosinas que llevaban en cestas y las dos imágenes de la procesión, Nuestro Padre Jesús Redentor ante Caifás y Nuestra Señora de la Estrella, esperaban a ambos lados del altar. Antes de salir se comunicaba que la junta de gobierno de la hermandad había analizado los pronósticos del tiempo y decidieron realizar la estación de penitencia, aunque con cambio en el itinerario para tener lugares de refugio. Y los necesitaron porque alrededor de las 18,00 horas decidieron entrar en la Catedral ante la llegada de lluvia y así proteger a las imágenes. Así terminó la procesión, a la espera de poder después trasladar los pasos.
Pero antes de llegar a este punto se pudo disfrutar de una parte de esta larga procesión que poco después de las 16,00 horas abría la puerta de 'Las Gordillas' para recibir los primeros aplausos. La comitiva comenzó a desfilar, con niños en el inicio de la procesión y esperando a la salida del paso de misterio, Nuestro Padre Jesús Redentor ante Caifás. El paso, que estuvo acompañado por la Banda de Cornetas y Tambores Santísimo Cristo a la Columna 'El Amarrado', de Ávila, se preparó para salir con las primeras órdenes y aprovechando las ruedas para abandonar el templo. Ydespués llegó la primera llamada, que se hizo para toda la gente que cada año acude a verles, para que puedan seguir con ellos. Y con la primera 'levantá', y más aplausos, comenzó este paso el recorrido, ya sin ruedas y subiendo los escalones que les llevaron hasta las calles, con algún costalero de puntillas.
La Estrella deja signos de libertad - Foto: David CastroEl turno fue después para el paso de palio, Nuestra Señora de la Estrella, acompañada de la Asociación Musical Santa Cecilia, de La Carolina, Jaén. «Vámonos a la calle, señores», señalaban antes de la primera subida en el interior del templo. Y la salida, con fuerza, de rodillas, para sacar a la imagen del templo y pasar por la ajustada puerta. Fueron recibidos con más aplausos ante el numeroso público mientras terminaban de colocar todos los enseres de la Virgen, principalmente el palio y la corona, y poder escuchar el Himno de España y los vivas para comenzar el recorrido. Antes, su propia llamada, con la 'levantá' que se dedicó a Óscar, que fue su capataz y que no pudo ganar la batalla a una enfermedad. «Va por él», se gritó, antes de pedir ir al cielo con la Señora. Bien alto, con fuerza, para que después el paso pudiera comenzar también el recorrido y recibir una lluvia de pétalos en los primeros compases del camino.
con brieva. Y así comenzó un recorrido que pasó por las Madres y tuvo una parada muy especial frente al colegio de Las Nieves, donde se realizó el acto de concesión del tercer grado a las internas, que se firmó allí mismo por la directora del centro, Laura Pérez, y el hermano mayor, Emiliano Cuervo. El propio representante de la hermandad leyó el documento correspondiente donde se señaló que ambas internas estaban en posesión «del buen comportamiento» y el «espíritu de trabajo» para acceder al régimen de semilibertad y de ahí esa concesión que se les concedió con un doble compromiso, «continuar el camino de reflexión» para llegar a su libertad definitiva y retomar «su vida en los márgenes de la legalidad». El documento fue refrendado también por las propias internas, que realizaron el recorrido de la procesión delante del paso de misterio.
Ya antes de la procesión, el hermano mayor explicó que la idea que ellos tenían era haber conseguido un indulto pero la propuesta «surgió en enero, por cuestiones de tiempo y forma» no fue posible y para que no quedase solo en una idea se consiguió en tercer grado para las dos internas, que procesionaron «delante del paso de misterio, que no es casualidad» porque «este paso representa el juicio de Caifás». La intención también es perpetuarse en el tiempo para que en otros años se conceda el indulto, aunque tiene sus dificultades, o, sin no es posible, la consecución del tercer grado.
En cuanto a la forma en que recibieron la noticia, el primer día que fueron y entablaron conversación con ellas, una terminó llorando «de la emoción» y «alegría» porque la concesión para ellas habría llegado en agosto para una y en noviembre para la otra.
La Hermandad de Nazarenos de Jesús Redentor ante Caifás y Nuestra Señora de la Estrella cuenta actualmente con 572 hermanos, con más de 40 que se han incorporado este año.