Un relato llegado desde Italia titulado La tarta mágica y el gato negro, escrito por Angelo Petrarca (residente en la localidad de Pozzuoli), se ha alzado con el primer premio del VI Concurso de Cuentos Infantiles sobre el Camino de Santiago, convocado el pasado mes de junio por la Asociación Amigos del Camino de Santiago en Ávila.
El jurado calificador, compuesto por Julio Veredas, Paula Velasco –ambos miembros de la Asociación de Novelistas Abulenses La Sombra del Ciprés–, Julio Collado y Eduardo Ramírez, decidió que el segundo premio era para el cuento titulado La ventana de Lucía, del que una vez abierta la plica resultó ser autora María Ángeles Zayas –residente en León–, y que el tercero lo merecía el relato titulado El pequeño Santi, firmado por el abulense Juan José Severo Huertas.
Los premios en metálico para cada uno de ellos son, respectivamente, de 300, 200 y 150 euros.
El jurado, tras la valoración de la calidad literaria y originalidad de los trabajos, decidió por unanimidad que el cuento merecedor del premio era el titulado La poza verde, pero una vez abierta la plica se supo que su autora, María del Carmen González López, había sido premiada ya en la tercera edición del concurso, por lo que incumplía la tercera base del certamen para hacer posible que fuese declarada la ganadora; no obstante, en atención a la calidad del relato, se acordó concederle una mención especial.
A esta sexta edición del Concurso se presentaron 14 cuentos desde todos los puntos de la Península, llegando también alguno del extranjero como ocurrió con el caso del ganador.
La entrega de los premios será el próximo 25 de octubre a las 19,00 horas en la sala del Episcopio de Ávila.
Valores del camino. A este concurso, que llegaba a su sexta edición, podía presentarse escritores de cualquier nacionalidad, siempre que su cuento, escrito en castellano –y que fuese original, inédito. no premiados ni pu blicado con anterioridad a través de ningún tipo de medio– reflejase en su temática «los valores que lleva implícitos el Camino de Santiago como son: la espiritualidad, fraternidad, solidaridad, hospitalidad, conocimiento, respeto y libertad».
La extensión máxima de los cuentos presentados a este certamen, teniendo en cuenta que su público es el infantil, fue fijada en tres folios.