Mejor hoy que mañana o mejor dicho, que el domingo. El Real Ávila se maneja en un mar de emociones, las de un equipo y afición que ya se ve y se siente campeón pero que aún debe cuadrar sus cuentas para poder decirlo. Haciendo su parte, la que le compete, las cuentas le salen redondas para cantar el alirón en su casa, ante su público, en un domingo que sería una auténtica fiesta en el Adolfo Suárez que hace demasiado tiempo que espera esta alegría.Parece el camino más lógico, el que pasa por ganar y no tener que esperar a lo que hagan los demás. Pero es inevitable pensar que podría serlo antes, este mismo miércoles, cuando el Real Ávila se desplace a Santa Marta escoltado por sus aficionados a un partido en el que deberá ganar –parte imprescindible en cualquiera de los casos– y estar pendiente de lo que haga el Salamanca UDS en el Sancti Spíritu. Si no gana y lo hace el equipo encarnado, el alirón se escuchará en la ciudad amurallada desde el Alfonso San Casto, un campo siempre incómodo e indigesto. El típico partido que suele atragantarse a cualquiera. «Sea con el equipo o la categoría que sea, siempre es un partido complicado. Es un campo que el Santa Marta dominan muy bien. Es un equipo muy difícil de ganar allí, con una idea e identidad muy clara.Siempre es un desplazamiento muy difícil, pero la situación en la que estamos no entiende de situaciones difíciles sino de objetivos bonitos».Y el ascenso, 22 años después, es el objetivo más bonito que puede haber para un Real Ávila con 100 años cumplidos.
Se contiene el aliento y las emociones en un Real Ávila que se mantiene en sus 'trece', ganar sin mirar lo que hagan los demás. El campeonato pasa por lo que hagan ellos. Cumpliendo lo suyo, serán campeones antes o después.Porque en el seno del cuerpo técnico que dirige Miguel de la Fuente asumen que el Salamanca UDS poco o nada se va a dejar ya por el camino. «Tengo muy claro que la racha que va a hacer el Salamanca desde que perdió ante el Tordesillas va a ser tremenda. Sólo la racha y la personalidad que hemos tenido para aguantar el tirón nos hará conseguir el objetivo».Está asumido, por ello, prefieren no pensar en lo que pueda pasar en el Sancti Spíritu, donde el Salamanca UDS visita al Diocesanos. «A todos los que tengo junto al banquillo no les dejo tener el móvil. Es un partido que empieza 15 minutos más tarde. No tiene mucho sentido seguirlo pero sé que nos va a llegar lo que esté pasando. Si la pregunta es si espero que pase algo en Sancti Spíritu, ojalá, pero mantengo lo que dije, lo nuestro es lo que nos puede ayudar». Es por ello que el partido en el Alfonso SanCasto se asume en el equipo encarnado como «un paso no definitivo pero sí de gigante.Una oportunidad y una responsabilidad».
Son días de controlar las emociones en una semana de tres partidos –el primero fue ante la Ponferradina B– que tras el duelo ante el Santa Marta desembocará en la visita de La Virgen del Camino al Adolfo Suárez. «Son días de controlar la ansiedad», la propia y la que llega desde un entorno tan ansioso como emocionado por lo que se viene. Aún así, «no es una gestión más difícil de la que hemos tenido que hacer.La gestión del grupo en la derrota es mucho más difícil que en la victoria.Lo que hemos pasado aquí hace un mes comparado con lo de ahora... Lo de ahora es mucho más fácil» explica. «Lo que tenemos que preparar al equipo es en estar fuertes mentalmente porque en todos estos partidos en los que había que ganar sí o sí no nos hemos visto por debajo en ningún momento y el equipo tiene que estar preparado si viene un episodio de verte en contra».Situación en la que «ante el Tordesillas falló». No quiere que vuelva a pasar.
El equipo está preparado. «Poco hay que decir». El mensaje «está claro, debemos salir a ganar el partido y a demostrar que lo que tenemos lo debemos conseguir. Me espero un equipo ganador de duelos, sin dudas, sabiendo lo que debemos hacer, yendo hacia adelante a ganar el partido desde el primer minuto sin tener luego que echar de menos minutos ni haber desperdiciado parte del partido».
Tiene claro Miguel de la Fuente que buena parte de lo que pueda deparar el duelo estará en el arranque del partido. «Desde el partido ante el Burgos Promesas en Castañares, donde el rival tuvo ocasiones suficientes como para decantar el partido, nos mentalizamos en que debíamos entrar a los partidos mucho más metalizados. Debemos tener mentalidad ganadora.Incluso cuando no estábamos en una buena racha debíamos salir al campo con la personalidad del líder diciendo 'aquí estamos nosotros' y eso lo hemos mejorado» comenta un entrenador 'acostumbrado' ya este curso a sufrir. «Una de nuestras señas de identidad este año es que el equipo ha ganado sufriendo. Me gustaría que todos los partidos fueran sencillos pero nuestra seña de identidad ha sido ganar sufriendo.El 'unocerismo' lo firmo hasta final de año» valora el técnico encarnado. «Debemos salir con personalidad y si tenemos el marcador a favor no echar el equipo atrás. De forma inconsciente muchas veces tendemos a guardar lo que tenemos porque otras veces nos ha salido bien pero en un campo como el Alfonso San Casto, un campo pequeño y un rival que genera ocasiones con dos buenos delanteros, no nos lo podemos plantear» advierte De la Fuente, que veía a los tormesinos a inicios de temporada como un equipo capaz de optar a los playoffs. «Quizás no les ha dado, pero en su casa y contra el líder me espero un equipo muy fuerte».