No es Miguel de la Fuente 'amigo' de poner en el foco, ni para lo bueno ni para lo malo, sobre aquellos que no han estado o los que vuelven. Pero en esta ocasión es diferente.Había tirado del 'Manual del Buen Entrenador' el técnico vallisoletano cuando en la previa ante el Bergantiños restó importancia a la ausencia de Mario Rivas y Adilson por sanción –en esos momentos aún no se conocía la baja de Álex Moreno por problemas físicos– convencido de la aportación de aquellos que venían apretando desde atrás. «Qué suerte tenemos como cuerpo técnico, que tenemos jugadores entrenando a un nivel altísimo esperando su oportunidad y la van a tener» decía ante lo que podía suponer las sanciones del delantero y el centrocampista. Sin embargo la derrota ante los gallegos reveló la realidad. «Vamos a ser claros, nosotros también notamos la ausencias –como cualquier equipo– y estamos hablando de jugadores muy en forma.Dando valor e importancia al rendimiento de los que han entrado en el campo, lo hemos notado» apuntaba como una de las claves tras el 0-1 del pasado fin de semana.Porque se mire como se mire, en estos momentos Mario Rivas, Adilson y Álex Moreno son parte de esa columna vertebral de este Real Ávila en puestos de playoffs. Nombres ya reconocibles de ese 'once ideal' que recuperará, al menos en buena parte, Miguel de la Fuente para visitar este domingo el Pepe Quimarán, donde aguarda un UDLlanera que ya sabe de la vuelta al equipo de Mario Rivas y Adilson. Álex Moreno está por ver.
«Recuperamos en la zona de arriba a Mario Rivas y Adilson, dos jugadores que ahora mismo se están compenetrando bien.Están entrenando para ser titulares, los veo bien, pero ahora mismo es complicado hacer una convocatoria sabiendo que te vas a dejar fuera gente potencialmente titular. Saltarán los once mejores y si hay cambios, saltarán los que pueden mejorar a los once que haya sobre el campo» señalaba Miguel de la Fuente en la rueda de prensa previa al choque ante la UDLlanera. Y aunque deje en el aire la vuelta al once inicial de Mario Rivas y Adilson, a buen seguro estarán. Lo contrario sería una sorpresa. Porque como apuntaba el propio entrenador, «hay jugadores que se nota cuando están, pero se nota muchísimo más cuando no están».Y ante el Bergantiños y en estos momentos ya de temporada se notó quiénes no estaban.
Recupera Miguel de la Fuente en punta de ataque a Mario Rivas. Primera buena noticia de la semana, porque el madrileño había sido hasta el partido ante elBergantiños el único jugador de la plantilla que no se había perdido ningún partido. No sólo eso, titular indiscutible en Liga y Copa, lo había jugado 'todo'. El máximo goleador del equipo –9 goles– únicamente se había ausentado del césped 17 minutos de juego reglamentario, los 7 últimos ante el Salamanca UDS en el Helmántico y los 10 finales ante el Rayo Cantabria.
Ante el Bergantiños, por primera vez, el madrileño veía el partido desde la grada. Allí donde por sanción también tuvo que verlo Adilson, un jugador que ha ido ganando importancia en el juego y en el equipo a medida que se ha ido reubicando sobre el campo. Porque el mediocentro de Guinea Bisau comenzó siendo en muchas ocasiones pareja de Dani Tena. Él ponía el despliegue y Dani Tena todo lo demás, que era mucho. La marcha del centrocampista abulense por motivos laborales le llevó a convertirse en pareja de Vitolo. No era lo mismo. Y si Vitolo se quedó en ese doble pivote, no así Adilson. Porque en la pelea por la posición encontró en Álex Moreno a un 'candidato' inesperado. En una temporada en la que parecía que su papel sería 'secundario', es ya un protagonista principal. En esta segunda vuelta, que estrenó con titularidad ante el Deportivo Fabril, no sólo se ha subido al carro del once inicial sino que ha estado en los partidos –salvo ante el UPLangreo– desde el inicio hasta el final. Y a medida que ha ido creciendo la pareja Vitolo-Álex Moreno en la medular, ha crecido la figura de Adilson en un espacio que no era desconocido para él pero en el que parece que todo encaja mucho mejor. A la espalda de Mario Rivas y por delante del doble pivote, en esa posición del '10', Adilson ha comenzado a firmar sus mejores partidos. Que MarioRivas y Adilson vuelvan son ya buenas noticias.
«Estas en tu derecho a mostrar desacuerdo, pero no faltas de respeto»
«Vergüenza ajena». Es lo que siente Miguel de la Fuente, entrenador del Real Ávila, ante el episodio ocurrido el pasado fin de semana ante el Bergantiños cuando ciertos aficionados encarnados insultaron a Omar, jugar rival, al grito de «puto moro de mierda». Insultos que eran recogidos por el colegiado y reflejados en el acta del partido y que le han valido al club encarnado una sanción de 1.000 euros «por pasividad en la represión de conductas xenófobas, procediendo la imposición de la sanción en su grado mínimo atendiendo a las circunstancias» decretaba el Juez Único de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). «Son cosas que no pueden pasar» señalaba Miguel de la Fuente ante lo ocurrido en una tarde en la que el mismo fue objeto de insultos desde una parte de la afición, como denunció en la rueda de prensa posterior al choque.
«A un campo de fútbol hay que venir a animar a tu equipo. Te puedes enfadar con el rival, con el árbitro... Estás en tu derecho de mostrar tu desacuerdo con pitos, con lo que quieras, pero no con faltas de respeto y menos con esos temas, como es el racismo».En su opinión «no sé cuál es la diferencia entre decir algo de la madre de alguien o meterte con la raza de alguien.Creo que deberían estar perseguidas las dos cosas» exponía el técnico del Real Ávila, que pedía «normalizar lo que es venir a ver un partido de fútbol donde todo el mundo quiere hacer lo mejor» haciendo con ello en un llamamiento a alejarse de determinadas posturas.
Valoró el técnico encarnado como «injusta» la sanción al club «cuando se trata de una acción muy personal de alguien.Entiendo que quizás la forma en que los clubes pongan más de su parte, que identifiquen mejor a ese tipo de personas puede ser esta, aunque me parece injusto que quien pague sea el club» valoró un entrenador que en más de una ocasión ha mostrado su desacuerdo o incluso «enfado» con su propia afición «cuando viene a animarnos a nosotros con actitudes que ni representan al fútbol, ni a nuestro club ni nos sentimos orgullosos de ello cuando estamos en el campo».