La Unión General de Trabajadores (UGT) ha denunciado la situación «insostenible» que viven los carteros de Ávila y provincia por la negativa de Correos a contratar nuevos trabajadores. Esto provoca una enorme «saturación» entre los empleados, que se ven obligados a asumir trabajos extraordinarios cuando se produce una incidencia en la plantilla. «Los compañeros de Correos tienen una saturación tremenda, tanto en la capital como en la provincia», aseguró José Carlos Pajares, secretario general de SP-UGT en Ávila.

Antonia Sánchez, secretaria del sector postal del sindicato, explicó más en profundidad la magnitud de la problemática: «Hace unos años había 33 secciones para repartir en la ciudad de Ávila, con 33 carteros, y en la actualidad, se ha reducido a 24 secciones y menos de 20 personas para el reparto». Un panorama que ha provocado un caos en el sistema de reparto postal y que está impidiendo que se ofrezca un servicio público de calidad. Es más, afirmaron que había «un stock de más de 8.000 cartas sin repartir, además de certificados y paquetes».

Un problema que se suma a las condiciones de trabajo de los empleados. «El reparto de paquetería lo han cambiado a la Unidad de Reparto 1 (calle Valseca, en la zona de Ajates), lo que provoca un peor servicio, porque no tienen ni siquiera un muelle para cargar y descargar. Lo tienen que hacer a mano», expone Antonia. Eso se une, por ejemplo, a la prohibición de la empresa a nivel nacional de usar los montacargas, que ha provocado que los carteros de Piedrahíta tengan que subir las cargas a mano de un piso a otro, con el riesgo que supone.

Por todo esto, el sindicato UGT reclama que se contraten trabajadores «atendiendo a estudios según la demanda». La situación económica de Correos, con un déficit de 1.200 millones de euros, «es fruto de una nefasta gestión de los sucesivos gobiernos y directores, pero no es un problema que le deba importar a los trabajadores, porque Correos debe dar un servicio público», zanjó Pajares.