Rojo por fuera, azul por dentro. ¿Qué es? La respuesta de la adivinanza estaba este sábado en las calles de las Hervencias, que volvieron a convertirse por segundo año consecutivo en una marea de Santa Claus gracias a la Papanoelada Solidaria del barrio. Una cita en la que Autismo Ávila volvió a latir al compás de su corazón azul y de la solidaridad demostrada por las cerca de 400 personas que se calzaron las zapatillas para colaborar con la entidad.

Se trataba de recorrer ocho kilómetros (andando, en bicicleta o corriendo) por el barrio, comenzando en el centro deportivo Tres60 (después de entrar en calor, eso día, con un chocolate caliente) y concluyendo en las viviendas que Autismo Ávila tiene en la calle Gloria Fuertes. Y todos gracias al empuje de las dos peñas del barrio, muy sensibilizadas, nos decía antes de comenzar la marcha Beatriz Hernández, una de las presidentas, con la causa del autismo. «Nos toca muy de cerca», recalcaba Beatriz, ataviada, como todos los participantes, con el típico gorrito de Papá Noel.

«Nosotros lo vivimos con mucha ilusión y muy agradecidos a las peñas, que nos echan una mano una vez más, porque nos hace mucha falta», decía por su parte Gerardo Herrera, presidente de Autismo Ávila. 

Hablaba Gerardo del «boom de casos» que registra la asociación. «Estamos en 150 niños y adultos con autismo. Cada año crecemos muchísimo y no damos abasto para dar servicio a todas las personas que lo necesitan. Necesitamos más infraestructuras, más espacios, y esta ayuda nos viene muy bien también para que nos conozcan, que eso influye en que aumentemos el número de casos atendidos», planteaba el presidente de Autismo Ávila.

El año pasado se recaudaron unos mil euros en la primera cita. Y en esta ocasión confiaban en volver a alcanzarla. De esta manera, podrán dedicarla, seguía hablando Gerardo, a ampliar infraestructuras. «Estamos abriendo espacios nuevos continuamente», decía para dar idea de ese crecimiento. 

Autismo Ávila cuenta en la actualidad con siete sedes: en Sotillo; en el Pablo VI, donde cuentan con dos aulas; en el Rastro, donde está el Centro de Atención Temprana; en el antiguo conservatorio, con las oficinas principales; en Agustín Rodríguez Sahagún, donde cuentan con un Centro de Día y un Centro de Detección; y las viviendas de las Hervencias. «Vamos a abrir una nueva sede en la calle Cinco Villas, que será un Centro de IntegraciónSensorial; y en el local que nos ha cedido recientemente el Ayuntamiento en la avenida de los Derechos Humanos vamos a abrir un espacio en los próximos años dedicado a aulas de atención, que es lo que más necesitamos. Y a actividades de formación para los 50 profesionales que forman parte de la plantilla».

Al terminar la marcha, la primera, por cierto, 'Pet Friendly' y en la que tomaron parte unos diez perros, se reconoció también al grupo más numeroso.