Había levantado expectación el festejo de este caluroso 6 de agosto, por lo que en el callejón de la plaza adradense se dieron cita varios toreros y banderilleros.
El portugués Antonio Ferreira se enfrentó a un primer astado que perdió las fuerzas en el tercio de varas lo que le hizo ir apagándose según avanzaba la faena. Aunque sacó algun muletazo aislado no tuvo lucimiento y mató de estocadadefectuosa asomando por un costado y varios golpes de verduguillo que silenciaron su labor. En el cuarto aprovechó el buen pitón izquierdo del de Sepúlveda para sacarle buenos naturales que fueron premiados con aplausos del respetable, pero con los aceros volvió a fallar y de nuevo se silenció su labor.
Al torero gaditano Salvador Barbera se le notó que carece de apoderado y que tiene pocos festejos en esta temporada porque dejó que castigaran sobremanera a su enemigo en varas; con la muleta no encontró el sitio y provocó las protestas del público más acrecentadas si cabe tras su manejo de la espada, con la que dio un recital de pinchazos que le valieron dos avisos y silbidos. En su segundo, con los lances de recibo hizo albergar esperanzas que se quedaron en un espejismo pues terminaron con más de lo mismo: fallo a espadas y aviso.
Gómez del Pilar, quien debutó con picadores en 2009 y cuenta entre sus méritos con el de triunfador del certamen de novilladas de Ávila premio de la peña taurina abulense y su triunfo en San Isidro en 2012, destacó en su primero con los lances de recibo y con un buen inició en el trasteo de muleta con pases importantes por ambas manos y remates de buena fractura ante un toro serio que fue a menos. Mató de pinchazo y estocada y cortó una oreja. En el que cerró el festejo el torero se lució con el capote y el toro derrochó fuerza en el caballo.Con la muleta empezó la faena con vistosidad y ligando algunos muletazos de mérito. Con dos pinchazos y estocada finiquitó al morlaco.