«Nos encontramos ante una villa romana grande y con una complejidad especial y notable». Así describe Juan Pablo López, arqueólogo responsable de Terra Levis, las sensaciones que su equipo está teniendo a partir de los primeros descubrimientos realizados en el yacimiento de la Pared de los Moros, en Niharra. «Un yacimiento arqueológico que se conocía desde hace bastante tiempo, pero que faltaba poner en evidencia el potencial real de este sitio», comenzaba a valorar López en la visita que periodistas y autoridades realizaban este jueves al yacimiento.

En esta primera campaña de excavación arqueológica que ahora se cierra («la fase embrionaria del proyecto», la describía) y que dará paso al trabajo en el laboratorio, aparecía en la zona los restos de un hipocausto, el sistema que los romanos empleaban para calentar sus termas y viviendas. Es, sin duda, el hallazgo más notable de los trabajos realizados hasta la fecha, y permite hablar, además, de la existencia de «una villa lujosa», en la que se emplearon «elementos de confort y aclimatación».

«Los hipocaustos», explicaba López,«se asocian a las termas, pero también podría ser el sistema de calefacción de las habitaciones nobles».

Aparece un hipocausto romano en la Pared de los Moros - Foto: Isabel GarcíaEn el caso de los restos aparecidos en la Pared de los Moros, lo cierto es que se trata, según López, de un descubrimiento «muy interesante», dado su buen estado de conservación. «Se observa la técnica de construcción de los romanos», decía el conocido arqueólogo, que hablaba de unas «termas de manual».

«Se trata de un espacio arqueológico realmente excepcional», quería dejar claro López la importancia del descubrimiento, que iba más allá al asegurar que dado su nivel volumétrico (hablamos de 80 metros cuadrados de salón climatizado que, de ser unas termas, «serían de un tamaño extraordinario),«como oportunidad museográfica ofrece en un futuro un espacio extraordinario».

Un hallazgo, proseguía hablando el responsable de Terra Levis, que también habla de la «complejidad del espacio en época romana». Se refería al hecho de que la villa que ahora comienza a aflorar a las afueras de Niharra, y junto a una gran plantación de fresas, fue un importante centro de poder, «con un propietario que acapara los recursos delValle Amblés», dueño de una «villa lujosa», y con una dedicación también «agrícola y ganadera a tenor de los distintos elementos arqueológicos que aparecen y que nos ofrecen una información muy rica sobre ese periodo» 

Aparece un hipocausto romano en la Pared de los Moros - Foto: Isabel García«Creemos que esta villa ocupaba un rol fundamental en el espacio de la zona», continuaba hablando el arqueólogo, que ahora comenzará a trabajar, junto a su equipo, en el laboratorio. Se trata, decía, de «unir las piezas de un puzzle apasionante» en el que también tienen mucho que decir los trabajos de excavación que se están llevando a cabo en localidades cercanas como San Juan del Olmo o Chamartín.

«Es súper interesante porque nos permite saber de dónde venimos nosotros», se emocionaba López al hablar de un trabajo que, decía, no es otra cosa que «las páginas de un libro muy bonito que nos van a permitir dar luz a la historia de nuestro territorio, así como generar identidad, además de recursos».

Acompañado por, entre otros, por Carlos Jiménez, alcalde de Niharra, el presidente de la DiputaciónProvincial,Carlos García, visitaba este jueves la excavación y anunciaba una reunión la semana próxima con la Consejería de Cultura para poder hacer visitable la Villa delVergel, enSan Pedro del Arroyo,«dentro de un plan común de gestión de todos los yacimientos».

Aparece un hipocausto romano en la Pared de los Moros - Foto: Isabel GarcíaSe refería a la riqueza de Ávila en materia de yacimientos «que no solamente tenemos que ser capaces de consolidarlos sino, también, de hacerlos visitables a los turistas».

En el caso de los trabajos que se han llevado a cabo en la Pared de los Moros, se enmarcan en el convenio de colaboración que la Diputación tiene conTerra Levis por valor de 40.000 euros.

A LA ESPERA DE LOS MOSAICOS

Muchas han sido las agradables sorpresas que los miembros de Terra Levis (el proyecto de investigación que nacía hace siete años y que se «abarca un territorio bastante amplio»: el delValle Amblés, la Sierra de Ávila y las Parameras. El 'Museo Abierto' de Ávila) han ido encontrando durante su trabajo a pie de campo en la Pared de los Moros.

Más allá del hipocausto, lo cierto es que la aparición de no pocas teselas les hacen sospechar que en la villa hubo mosaicos. «Aún no han aparecido, pero aparecerán», decía con ilusión y optimismo Juan Pablo López, que mostraba también restos de cerámica (algunos, incluso, con iniciales grabadas), de estuco con restos de color, alguna que otra moneda y restos de animales. «Esto nos habla de la dedicación ganadera y agrícola de esta gente», reflexionaba el arqueólogo, que mostraba algunos restos de bóvidos que bien podrían ser los de «las primeras avileñas del paisaje». 

Aparece un hipocausto romano en la Pared de los Moros - Foto: Isabel GarcíaAnte ese hallazgo, López lanzaba el guante a la IGP Carne de Ávila para  tratar de analizar esos restos de manera genética.

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