Solosancho y Hoyos del Espino rehabilitarán dos viviendas que se destinarán a alquiler social dentro del proyecto 'Rehabitare' puesto en marcha por la Consejería de Medio, Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León. Para lograr este objetivo ya se han sacado a licitación las obras de rehabilitación que, tanto en el caso de Solosancho como de Hoyos de Espino tienen un presupuesto cercano a los 80.000 euros y un plazo de ejecución de seis meses.

La vivienda de Solosancho está situada en el número 7 de la calle Nueva, actualmente desocupada y sin uso específico. Es por ello que se decide preparar esta oferta de alquiler social con una rehabilitación que ocupa la totalidad de la primera planta.

La vivienda tiene dos plantas de altura, donde la planta primera, que es la que se destina a casa, cuenta con dos dormitorios, cocina, baño y salón comedor. El edificio se construyó en el año 1981, con una superficie en la planta primera de casi 74 metros cuadrados.

La rehabilitación del edificio tiene como objetivo la recuperación de uso de vivienda, adaptándola para que se mejoren sus condiciones de habitabilidad. Para ello se proyecta una rehabilitación del inmueble para una vivienda de alquiler social, con una distribución de un salón-comedor-cocina, dos dormitorios y un baño.

En Hoyos del Espino la vivienda está situada en el número dos de la travesía del Pilar, dentro del casco urbano de la localidad. La vivienda cuenta con dos plantas más bajo cubierta, con una superficie construida total de 183 metros cuadrados.

En este caso, se llevará a cabo una actuación de rehabilitación que no va a producir una variación esencial de la composición general exterior ni del uso, teniendo en cuenta además que en 2017 el inmueble fue objeto de una reforma parcial que afectó a la cubierta de la misma, que fue completamente sustituida, a la vez que se rehabilitaba la vivienda gemela. 

De todas formas, se trata de un edificio que data de 1920 y que inicialmente estaba destinado a casa del maestro. Es una vivienda unifamiliar con dos plantas más un espacio bajo cubierta que presenta un estado de conservación deficiente, ya que lleva tiempo sin estar habitada. La distribución incluye salón-comedor, cocina, cuarto de lavado y baño en la planta baja, dos dormitorios y un segundo baño en la planta primera y una bajocubierta con trastero y desván.

En la ejecución del proyecto se incluyen demoliciones de tabiques y carpintería interior, además de consolidación de la estructura de madera de los forjados. Se recuperará la escalera adaptando los escalones de madera a los niveles de cada piso terminado y se realizará una nueva ejecución de tabiques que modifique la distribución para nuevas estancias. Habrá también actuaciones en carpintería exterior y fontanería además de calefacción, electricidad y telecomunicaciones. 

La actuación en estas viviendas se enmarca dentro de las promovidas con cargo al Fondo de Cohesión Territorial con el objeto de atender las necesidades habitacionales de municipios con problemas derivados de la vulnerabilidad territorial, con el objetivo de garantizar la cohesión territorial y social.

El programa Rehabitare tiene como objeto incrementar el parque público de vivienda de alquiler social de la comunidad y fijar población en el medio rural a través de la recuperación de inmuebles en desuso. Su finalidad prioritaria es atender las necesidades habitacionales de los colectivos de especial protección, especialmente los jóvenes.