La lluvia que está previsto que durante todo el domingo caiga sobre Ávila no impedirá que la tradicional cabalgata de los Reyes Magos del 5 de enero salga a las calles de la ciudad. Fuentes municipales confirmaban este sábado a Diario de Ávila que el desfile tendrá lugar tal y como está previsto, para alegría de los más pequeños.

Habrá que ir, eso sí, bien preparados, con chubasqueros, paraguas y ropa de abrigo. Y es que la Agencia Estatal de Meteorología ha lanzado un aviso amarillo por lluvias para toda la jornada del domingo sobre Ávila. Lluvias que se esperan con una probabilidad del cien por cien durante todo el día y que podrían dejar precipitaciones de 40 mililitros en doce horas a su paso por el Sistema Central abulense y que a partir de las seis de la tarde vendrán, además, en forma de tormentas.

Pero la ilusión de los niños será, sin duda, más fuerte que la lluvia. Acompañados de padres, abuelos y amigos, los pequeños irán tomando posiciones en torno a las siete de la tarde, hora en la que está prevista que arranque la cabalgata en la calle Banderas de Castilla.

Desde allí partirá una comitiva que este año estará formada por más de medio millar de personas y en la que sus majestades realizarán el recorrido en sus carrozas, en vehículos eléctricos y a pie en el transcurso de un desfile que, como otros años, contará con un tramo sin sobrecarga sensorial para personas con trastorno del espectro autista y en el que se distribuirán más de 2.000 kilogramos de caramelos. Estos serán suministrados por la empresa abulense Golydul. Se trata de caramelos blandos, con un 10 por ciento de pulpa de fruta, además de ser sin gluten, sin lactosa ni alérgenos y de contar con surtido de sabores frutales.

En la cabalgata participarán 15 carrozas  de las que siete  participarán en el concurso convocado por el Ayuntamiento y que repartirá más de 5.000 euros en premios.